El fin del eurocomunismo

«El secretario g eneral del PC italiano ha dicho en la conferencia de prensa celebrada ayer, en Roma, que el eurocomunismo ha salido réforzado de su viaje a París, Roma y Moscú. (...)Agregó: "Es necesario saber lo que se entiende por eurocomunismo. Se trata, para nosotros, de afirmar la necesidad de que cada partido siga vías originales en la construcción del socialismo." (...)

Los comunicados publicados en París, Moscú y Belgrado no ocultaban la existencia de diferencias y divergencias entre los partidos comunistas y en el movimiento obrero en general. Declaró que no fue a Moscú para obtener la bendición de su política de compromiso histórico, y reveló que había hablado en el Kremlin del problema de los disidentes: "Las cosas que decimos en Italia sobre ellos, las decimos igualmente cuando nos encontramos con los soviéticos. Somos. partidarios de la aplicación de una libertad de expresión en los países socialistas." (... )

Esta conferencia de prensa sugiere diversos comentarios. ( ... )

El acuerdo Brejnev-Berlinguer confirma un hecho irrefutable: el principal partido comunista de Occidente, el que está más próximo al poder, el que se dice abierto y liberal, se encuentra en la imposibilidad material de romper el cordón umbilical que le une a Moscú.

Es evidente que Berlinguer no puede sacar (suponiendo que lo quiera) las consecuencias lógicas de lo que él presenta como una nueva concepción moderna y democrática a la italiana, a la europea, del marxismo.

Esto exigirá romper con el Kremlin, cuyos métodos policíacos al interior y la política imperialista al exterior no es necesario probarlos. Ahora bien, cada vez que avanza en la herejía verbal destinada a intoxicar a los italianos, Berlinguer da dos pasos atrás en dirección del Kremlin. ( ... )

La capitulación es completa: el PC italiano se alinea públicamente con las tesis soviéticas.(... )»

12 octubre