Malestar en Asturias por el abandono del ferrocarril de Langreo
Han quedado oficialmente paralizadas las obras de rejuvenecimiento y restauración del túnel de Carbayín, del ferrocarril de Langreo, iniciadas el pasado mes de marzo y que se venían realizando sin suspender el tráfico hasta el desprendimiento de otra parte de la bóveda ocurrido hace dos meses, cuando la cuenca minera del Nalón quedó incomunicada con Gijón por medio de este ferrocarril de ancho internacional. De forma que causó graves perjuicios a Hunosa, que ha de realizar su transporte de carbones y estériles en camiones; al Ayuntamiento de Langreo, cuyas carreteras están siendo destrozadas por estos camiones, y a gran número de asturianos, que padecen la incomodidad de un transbordo ferrocarril - autobús- ferrocarril para desplazarsé desde Laviana o Langreo a Gijón o a Oviedo.Las obras, ahora paralizadas, fueron iniciadas antes y con independencia del posterior desprendimiento de una parte de la bóveda. Su objetivo era dotar al túnel de Carbayín de un sistema de refuerzo, similar al de los túneles suizos, utilizado por primera vez en España, aunque la técnica, los estudios previos de balizaje de túneles y el material metálico son totalmente asturianos. Esta situación de aparente desinterés de la Administración por el ferrocarril de Langreo, cuyo futuro afecta de alguna manera a 300.000 personas, a Hunosa, a Ensidesa, al puerto de Gijón, al parque de carbones de Aboño y a las centrales térmicas que toman carbones de la cuenca minera, y las recientes declaraciones del subsecretario de Transportes, anunciando el proyecto de modificación del ancho europeo del ferrocarril de Langreo a ancho Renfe en el tramo comprendido entre La Felguera y Mosquitera, ha recibido una fuerte réplica asturiana, por entender que resultaría más conveniente su conversión al ancho FEVE para seguir transportando viajeros y pór acornodarse mejor a las exigencias de, Hunosa, que necesita un ferrocarril pequeño, elástico y barato, capaz de efectuar recorridos cortos y transportes de tierras, que son rechazados por Renfe, según afirmó la gerencia de la Empresa Nacional Hullera en el Nalón.
La Cámara de Comercio de Gijón, PSOE, CCOO y el Ayuntamiento de Langreo se han mostrado partidarios de exigir, como primer paso a cualquier planteamiento posterior, la reparación del túnel de Carbayín, y es precisamente cuando se encontraba en ejecución el plan de su rejuvenecimiento cuando son paralizadas las obras y deja sin resolver la obstrucción del túnel producida por el desprendimiento de parte de la bóveda. Entre tanto, la empresa que realizaba las obras de restauración del túnel ha comenzado a enviar cartas de despido a sus trabajadores al haberse interrumpido la obra, debido a la insuficiencia presupuestaria del FEVE.
