Tres incendios provocados destruyen 500 hectáreas de pinos en la sierra

A última hora de la tarde del jueves, desde las rampas de acceso al túnel del Guadarrama, se podía observar una cadena de columnas de humo que cubrían el valle, desde Guadarrama hasta Navacerrada. Más de quinientas hectáreas de pinos y pastos habían ardido en tres incendios consecutivos que, según vecinos y autoridades locales de la comarca, habían sido provocados.A media tarde de ayer continuaban en suspuestos de vigilancia los retenes que durante la tarde y la noche anterior habían trabajado en la extinción de los tres fuegos. El mayor de ellos se registró en Guadarrama y afectó a unas trescientas hectáreas. Este incendio comenzó hacia las cuatro y media de la tarde y en pocos momentos adquirió unas proporciones alarmantes, especialmente porque las llamas se dirigían apresuradamente hacia los depósitos de propano de La Jarosa y hospital Generalísimo Franco.

A las siete de la tarde, aproximadamente, comenzó otro incendio en el término municipal de Navacerrada y, pocos minutos después, otro más, próximo al Valle de los Caídos. Estos dos últimos incendios, pese a su menor magnitud con respecto al de Guadarrama, obligaron a una dispersión de las fuerzas del Ejército, Guardia Civil y bomberos que habían acudido a sofocar el incendio primero.

Victoriano Bravo, oficial mayor del Ayuntamiento de Guadarrama, informó ayer a EL PAIS que, en su opinión, los incendios, por la forma en que se produjeron, fueron provocados. La mayor parte de los pinos destruidos eran maderables.