Los clubs de Tercera estudian por su cuenta las reivindicaciones de los futbolistas

Esta tarde se celebrará en los locales de la Federación Española una reunión de representantes de clubs de Tercera. La reunión ha sido promovida por los clubs castellanos con la intención de colaborar en la búsqueda de soluciones ante la problemática creada con el anuncio de huelga de los jugadores. Antonio Fernández, vicepresidente del Carabanchel, ha sido el iniciador de la idea. Se trata de un hombre singular dentro del mundillo del fútbol, de un hombre que desde hace un par de años busca sin ningún apoyo en sectores más altos soluciones para ese desastre que son las estructuras del fútbol español.

RELAÑOEl órgano supremo del fútbol español es la Asamblea Nacional; allí no fue posible que los clubs de Tercera adoptaran una postura ante las reivindicaciones de la AFE, entre otras cosas porque entre todos ellos no suman más que 120 votos, lo que no supone ni el 10% del total de los mismos, porcentaje preciso para que sea estudiada una propuesta. Pero es que, aparte de ello, Porta se encargó de asegurar las cosas antes: «En los días anteriores a la asamblea Porta celebró reuniones con los representantes de los clubs: invitó un día a los de Primera a comer en un hotel de cinco estrellas, otro día a los de Segunda en uno de cuatro y, finalmente, a los de Tercera, en uno de tres. Allí pidió un voto de confianza para tratar las reivindicaciones de la AFE; primero dijo que se trataba de un tema difícil, que habría que estudiarlo con mucho tacto, que pensáramos bien los clubs a la hora de hacer concesiones a la AFE, que podríamos llegar a pagar cuatro o seis millones de seguridad social... Total, que consiguió el voto de confianza que pedía y el tema ni se trató en la asamblea. Nadie lo sacó. ¿Para qué, si ya todo estaba decidido? Además, piense que entre todos los clubs de Tercera tenemos menos votos, que entre el Madrid, el Barcelona y el Athletic de Bilbao. Porta tiene de su lado a los grandes, porque les da todo lo que quieren. Este año, por ejemplo, ha decidido que los beneficios por taquilla de los partidos de la selección se repartan entre los clubs que aportan los jugadores internacionales, o sea, entre los grandes. Eso sirve para seguir acentuando las diferencias.»

La reunián de hoy, una incógnita

Los clubs castellanos de Tercera se reunieron hace poco y quedaron de acuerdo en que los jugadores tienen razón en sus reivindicaciones, por lo que decidieron respaldarles. Esta tarde, a las cinco, y en los locales de la Federación -que no se ha atrevido a negárselos- están convocados todos los clubs de Tercera de España. Pero, ¿acudirán a la llamada?: «Espero que seamos bastantes. Para muchos es un problema desplazarse; un problema incluso económico. Otros creo que han sido presionados por sus respectivas federaciones regionales para que no vengan. Pero a pesar de todo espero que seamos muchos, porque éste es un problema importante y nos afecta. Una de las principales peticiones de los jugadores es la abolición del límite de edad en Tercera. Eso sólo nos atañe a nosotros. ¿Por qué van a hacer otros esa negociación? Si clubs y jugadores nos ponemos de acuerdo en abolir ese límite, se acabó el problema, al menos por ese lado. »Por ese lado sí, pero queda el problema de las deudas. Mucho de los clubs que deben dinero a jugadores son de Tercera. ¿Cómo van a responder ellos?: «Respecto a eso sabemos que los jugadores no van a ceder, y hacen bien, porque cada uno tiene derecho a cobrar por su trabajo lo prometido. Así que creo que no hay que esconderse como se ha venido haciendo hasta ahora, sino buscar las fórmulas para que esas deudas sean satisfechas y para que situaciones así no vuelvan a repetirse. Es una cuestión de responsabilidad y seriedad de cada cual. Esas deudas se producen por la vanidad de los directivos que quieren que su equipo llegue lo más arriba posible y que fichan jugadores buenos a los que ofrecen cantidades que no les pueden después pagar. Yo tengo cierta esperanza en que lleguemos a un acuerdo.»

Flota otra pregunta: si los clubs de Tercera se ponen de acuerdo con los jugadores, ¿cómo reaccionaría la Federación? ¿Sancionaría esa rebeldía?: «Tendría que tragar. Mire, Porta siempre dice: "Confiad en mí, que soy vuestro padre. Yo lo arreglo todo, no os tenéis que preocupar por nada. No os creéis problemas." Pues bien, a raíz de ese voto de confianza que tan bien se supo trabajar fíjese en qué lío nos hemos metido. No, ahora tenemos que trabajar todos por arreglarlo y aportar soluciones. A Porta ya no se le pide que arregle nada, sólo le vamos a pedir que nos deje a la gente del fútbol que lo arreglemos. El es un buen orador, pero lo de los futbolistas ya no se arregla hablando. Además tiene que darse cuenta de que se ha acabado la época en la que el que estaba en un cargo alto podía hacer lo que quería. Han cambiado las mentalidades y la gente no se deja manejar como hasta hace poco.»