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Fallecen cuatro personas y quince resultan heridas al chocar frontalmente dos autobuses

Cuatro muertos y quince heridos, algunos de ellos muy graves, es el balance del accidente ocurrido en la madrugada de ayer en el kilómetro 171 de la carretera nacional 620, Burgos-Portugal, a dieciséis kilómetros de Tordesillas, en la provincia de Valladolid.

El hecho se produjo a consecuencia de una colisión frontal de dos autocares en un estrechamiento de la calzada situado en un puente sobre el río Trabantos. El autocar matrícula SE-5.138-C, conducido por Diego Márquez Arquez, de veintiocho años, que circulaba hacia Salamanca, chocó contra el autocar luxemburgués Q-7.624, conducido por Nicolás Roger Schroeder, que iba en sentido contrario y en el que viajaban varios emigrantes portugueses. El golpe fue fortísimo. El vehículo luxemburgués desplazó hacia atrás varios metros al sevillano, y ambos arrollaron al Ford Fiesta matrícula SS-4480-I, en el que viajaban seis salmantinos residentes en Guipúzcoa.Algunos metros de la barandilla del puente quedaron destrozados y los autocares se empotraron el uno en el otro. Los dos conductores fallecieron en el acto y posteriormente murieron los súbditos luxemburgueses Camille Dupont y Francois Zens. El resto de las personas, entre ellas varios niños que viajaban en el autocar de Luxemburgo, sufrieron heridas de diversa consideración. Uno de los ocupantes del turismo donostiarra, Sebastián González Reyes, se encuentra en estado de suma gravedad y otros dos también padecen lesiones importantes.

Nada más tener conocimiento del hecho, se peysonó en el lugar la Guardia Civil de Tráfico que tuvo que emplear sopletes para cortar las chapas y proceder a la evacuación de los heridos.

Durante más de cinco horas numerosos coches que circulaban por la citada vía tuvieron que ser desviados por otra ruta comarcal.

Sebastián González Reyes, Manuela Iglesias Fernández, Moisés Angel González Iglesias, ,José González Iglesias, María José González Iglesias y Raquel Amiana Biurre, ocupantes del turismo de San Sebastián y Adello Correa Pimenta, Purificación de Jesús López, José Carlos López Pimenta, Manuel Ruíz López Pimenta, Albina Diez Santos y Jacinta Dosdarez, que viajaban en el autocar luxemburgués, fueron trasladados a la residencia sanitaria de Valladolid, mientras que otros tres emigrantes portugueses fueron atendidos en un ceptro sanitario de Salamanca.

El trágico accidente pudo tener aún mayores repercusiones si ambos autocares hubiesen transportado mayor número de pasajeros. El andaluz iba vacío y el luxemburgués llevaba solamente doce ocupantes.

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