_
_
_
_

Los alemanes occidentales consideran mediocres a los miembros de su Parlamento

Finalizado el año parlamentario en la República Federal de Alemania, los ciudadanos alemanes han dado mala nota a sus representantes en el Bundestag (Cámara baja). Según el Instituto de la Opinión Pública de Allensbach, la mitad de los adultos de este país cree que sus parlamentarios son mediocres. Desde 1960 no se había registrado un índice tan bajo en el aprecio de los alemanes por los «padres de la Patria».

Un diputado cualificado, el profesor Biedenkopf, de la Democracia Cristiana, ha enjuiciado así el resultado de la encuesta: muchos políticos desconocen realmente las verdaderas inquietudes de los ciudadanos. Al tiempo hablan un lenguaje incomprensible a muchos y, por añadidura, muchos parlamentarios buscan más su medro personal que servir a los ciudadanos.Como consecuencia de la supuesta mediocridad del conjunto de los diputados del Parlamento, se citan la aparición de grupos nuevos de acción política, entre ellos los ecologistas, y la potenciación de izquierdas y derechas extraparlamentarias. La incomparecencia en sesiones clave del Bundestag es un indicio de mediocridad suscitado últimamente con insistencia por la opinión pública. Hace algunas semanas, durante el debate sobre los derechos de los trabajadores extranjeros en la RFA, solamente había presente una veintena de diputados, de un total de 496 que integran la Cámara baja alemana.

En Alemania, como en otros países europeos, la pérdida de imagen de los parlamentarios está, en cierta medida, relacionada con la poca asiduidad de estos a sus puestos de trabajo.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_