Carlos Ferrer propugna un pacto económico para tres años

«El nuevo programa económico que sustituya al pacto de la Moncloa tendría que cumplir, a nuestro juicio, dos condiciones: una duración de tres años y que sea negociado entre los trabajadores y empresarios directamente», manifestó ayer el presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Carlos Ferrer Salat.Como piezas fundamentales del nuevo programa de política económica, del que la patronal está preparando estos días un esquema que sirva de base para sus discusiones con las partes interesadas, el señor Ferrer señaló que era necesario fomentar la inversión y el empleo como premisas fundamentales. lo que exigirá un aumento del excedente empresarial, con objeto de que las empresas puedan invertir: el excedente ha experimentado una fuerte reducción en estos últimos cuatro años, ya que ha pasado de representar alrededor del 9% el pasado año. Señaló también que era necesaria una mayor responsabilidad de los elementos sociales y económicos y un nuevo marco de relaciones laborales

En este sentido, José María Cuevas. presidente del comité social de la CEOE. amplió la postura de la patronal respecto a este tema indicando que cualquier reforma del marco laboral del país no puede hacerse de forma parcial o con retoques de matiz, sino de forma global. Los deseos de los empresarios en este sentido consisten en un menor protagonismo de las autoridades políticas y del Estado en las negociaciones entre empresarios y trabajadores. ya que el sistema de tutelas del franquismo debe dar paso a una mayor libertad y responsabilidad negociadora de los agentes económicos y sociales.

Estrategia para el 79

El señor Cuevas señaló que la CEOE ha discutido internamente la estrategia de negociación para el año próximo con las centrales sindicales.Los directivos de la patronal presentes en la reunión con los periodistas expresaron su deseo de que en España se Implante una auténtica economía de mercado, modelo del que -según su opinión- estaríamos muy alejados en estos momentos. El nuevo modelo económico debería caracterizarse por un mayor grado de libertad en el comportamiento de los agentes económicos, reduciendo la intervención del Estado en terrenos como el de la fijación de los precios, las concesiones de industrias, la asignación de los recursos financieros, el papel del sector público, etcétera. Un mayor grado de libertad y de competencia entre los agentes económicos es fundamental, en opinión de Carlos Ferrer, para el progreso económico.

El señor Ferrer señaló que la libertad económica había dado buenos frutos en la historia de España, como lo demuestra la etapa de progreso económico iniciada con la liberalización de los años 60, que según sus palabras, «fue iniciada a instancias de los empresarios».