El primer partido de la izquierda peruana califica de farsa las pasadas elecciones

«Las elecciones peruanas han sido una farsa. Nueve candidatos de la oposición fuimos detenidos y posteriormente deportados y, hasta el momento, no existe ninguna comunicación oficial que nos autorice a regresar a Perú», manifestó ayer a EL PAÍS Hugo Blanco, dirigente trotskista del Partido Socialista de los Trabajadores, y primer candidato del Frente Obrero, Campesino y Estudiantil Peruano (FOCEP), que se ha convertido en la tercera fuerza política del país y la primera de la izquierda.«Pese al fraude que han supuesto estas elecciones -dice Hugo Blanco-, el FOCEP es la tercera fuerza de Perú y eso que tres millones de personas analfabetas, fundamentalmente campesinos, que componen la base electoral de nuestra coalición, no han podido votar por prohibírselo las autoridades. Nuestra presencia en Europa -agrega Blanco- tiene por objeto denunciar la farsa electoral peruana y el fracaso de la nueva política de Carter para América Latina. Acudiendo a las elecciones hemos querido demostrar que, pese a las manipulaciones, no se nos ha podido arrebatar el casi medio millón de votos conseguido. En cuanto al new deal de Carter respecto a Suramérica, vamos a demostrarque se trata de un cambio de máscara, de cirugía para hacer presentable el régimen peruano tras las elecciones. »

-Sin embargo, estas precisiones parecen contradecir la presentación de su coalición a una Asamblea constituyente...

-Los ejes de nuestra política de concurrencia a las elecciones han sido avanzar hacia la creación de un Gobierno de los trabajadores peruanos que haga posible el socialismo, y hacia la configuración de un ejército formado por las milicias de trabajadores. Desde la Asamblea Constituyente vamos a decir a las masas que cuando los pueblos toman conciencia, el parlamentarismo ya no le sirve de nada a la burguesía, y vamos a ver quién rompe el respeto a la legalidad electoral. Lo que, desde el principio, los trabajadores debemos hacer es organizarnos y avanzar hacia el socialismo sin ninguna transacción con el capitalismo.

Riesgos de golpe

-¿No existe el riesgo de que esta política les conduzca a un golpe militar de cariz similar al de Chile, Uruguay o al de la Junta argentina?

-Existe el peligro de un pinochetazo, pero la única manera de hacerle frente consiste en el fortalecimiento de las masas y no capitulando ante la burguesía. Hemos de tener cuidado en no caer en los mismos errores en los que se cayó en Chile. No haremos caer a las masas en la ilusión de que existen sectores militares defensores de los trabajadores, ni crearemos la falsa imagen de que únicamente desde el Parlamento se avanza políticamente. Nos hemos propuesto impulsar las organizaciones de defensa de las masas y caminar por el sendero del control del proceso productivo por parte de los trabajadores.

- ¿Cuáles han sido las causas por las que no lia sido posible antes de las elecciones una coalición de izquierda más amplia, con los velasquistas, coinunistas o maoístas?

-De los maoístas discrepamos en el tipo de Gobierno que ellos proponen, ya que incorporarían a sectores progresistas de la burguesía, lo cual nosotros rechazamos. Con los comunistas no fue posible, ya que ellos dieron un apoyo crítico al Gobierno.

Pacto cívico-militar

-Existe, no obstante, alguna posibilidad de alianzas políticas a partir de ahora?

-Evidentemente, sí. Con la Unión Democrática de Perú (UDP), maoísta, podríamos unirnos, pese a las discrepancias, como va intentamos hacerlo ante actividades concretas. Por ejemplo cuando cerramos la campaña electoral pretendimos dar un mitin conjunto con ellos, pero fue prohibido por el Gobierno.

-A su juicio, ¿son ciertos los argumentos que establecen la existencia de un pacto entre el directorío militar peruano y el APRA, de Aya de La Torre?- Ese pacto existe. Es un secreto a voces que caminan hacia un Gabinete cívico-militar, pese a que basaron su campaña electoral en ataques a los militares, lo cual les dio muchos votos. Pero a los militares y al APRA les acerca el que ambos son defensores de los mismos intereses -los intereses imperialistas-, aunque propongan reformas mínimas, menores que las que en su día Velasco Alvarado propuso. Tanto los militares como el APRA se encuentran hoy a la derecha del velasquismo.

En cuanto a la situación económica peruana, Hugo Blanco cita las palabras del actual ministro peruano de Economía, quien dice que la crisis económica puede durar dos años más. «El Fondo Monetario Internacional -agrega- tiene de rodillas al Gobierno. Es el FMI quien dirige la política económica del Gobierno peruano pese a que éste ofrece una mínima resistencia a este dictado», añade.

Respecto a las tareas política del FOCEP, a partir de ahora Blanco se refiere a que durante el proceso constituyente esta coalición de izquierda, mayoritariamente trotskista, propone un proyecto de Constitución para un país socialista.