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Trabajadora muerta por presunta acción de un piquete de huelga

Una joven trabajadora de catorce años de edad ha resultado muerta al ser arrollada por un vehículo, ocupado, al parecer, por los miembros de un piquete de huelga de Ia empresa en la que venía prestando sus servicios. Se trata de la joven Luisa Carrasco Alejandro, de Zaragoza, que murió arrollada por un automóvil Seat 600 cuando se encontraba en las puertas de la factoría de Toldos Benedi, en Zaragoza, donde trabajaba como aprendiza.

Al parecer, la muchacha había manifestado su intención de acudir ayer, miércoles, al trabajo, desoyendo la convocatoria de huelga del personal de esta empresa, dedicada a la fabricación de lonas y artículos de camping y deporte. En repetidas ocasiones los piquetes de huelguistas habían instado a la muchacha a desistir de su actitud.El hecho que produjo la muerte violenta de la joven Luisa Carrasco acaeció durante la mañana de ayer, en las inmediaciones de la carretera de Madrid, y en el lugar en el que se alzan las factorías de Benedi y Yuma, dedicadas a la producción de textiles para camping y deporte, adscritas ambas al mismo grupo empresarial.

Los trabajadores de estas dos firmas, pertenecientes a la misma empresa, se encuentran en huelga debido a que algunas de sus reivindicaciones laborales no habían sido puntualmente atendidas por la dirección de la empresa. A fin de defender su postura de huelga se habían formado algunos piquetes, uno de los cuales estaba integrado por mujeres trabajadoras de las dos fábricas. Al parecer, y según testigos presenciales, las componentes de uno de estos piquetes viajaban en el Seat 600 que arrolló a Luisa Carrasco a la entrada de la fábrica.

Según esos mismos testigos, la joven Luisa Carrasco, que se mantenía en su propósito de no respetar la decisión colectiva en favor de la huelga, se encontraba ayer por la mañana departiendo con un grupo de compañeras de tajo a la entrada de la fábrica. En aquel momento se acercó al grupo el automóvil Seat 600 antes indicado, que era conducido por una de las trabajadoras de la empresa. Desde el vehículo la conductora y otras dos ocupantes increparon a las reunidas -en especial a Luisa Carrasco- y las conminaron a que depusieran su actitud favorable a la incorporación al trabajo. Al ser desoídos estos requerimientos, y pocos instantes después, testigos aseguran haber visto al vehículo abalanzarse sobre el grupo de trabajadoras que permanecía en actitud expectante ante la puerta de la fábrica. Todas ellas, excepto Luisa Carrasco, consiguieron sortear a tiempo la embestida del vehículo, que, sin embargo, arrolló a la citada trabajadora. Las ruedas del Seat 600 pasaron sobre su cabeza, lo que le produjo gravísimas lesiones.

El suceso provocó las lógicas escenas de pánico e histerismo entre los presentes. Algunas de las jóvenes obreras tuvieron que ser asistidas después por ataques de nervios. A los pocos segundos de ocurrido el siniestro algunos compañeros de trabajo introdujeron a la joven herida en un vehículo particular para transportarla a un centro asistencial de Zaragoza; sin embargo, su fallecimiento se produjo antes de que el vehículo pudiera llegar a la clínica más próxima.

Pocos minutos después llegaban al lugar las primeras asistencias y los agentes de la Guardia Civil, que habían sido informados de lo sucedido.

Desde entonces, la Guardia Civil del sector y otros centros oficiales de Zaragoza han guardado silencio sobre lo sucedido. Las principales centrales sindicales de la capital aragonesa tampoco han dado a conocer hasta el momento su versión de lo sucedido, y las factorías de la empresa, debido a la huelga, permanecen prácticamente desiertas. Por su parte, los trabajadores de Yuma y Benedi, en su mayoría mujeres, han anunciado la celebración inmediata de una asamblea al objeto de conocer lo sucedido y emitir un pronunciamiento conjunto.

Contrariamente a esta versión recogida por nuestro corresponsal, las agencias informativas Efe y Europa Press sostienen que la víctima, junto con otras trabajadoras, permanecía ante la puerta de la fábrica cuando fue arrollada por un vehículo ocupado por otras compañeras que pretendían incorporarse al trabajo.

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