Los parlamentarios apoyan la integración de la provincia en la región castellano-manchega

El plenario de parlamentarios por la provincia de Madrid, reunido ayer en el palacio de las Cortes, decidió que Madrid se integre en la región castellano-manchega, junto a las provincias de Castilla la Nueva, idea suscitada por el diputado comunista Ramón Tamames, que deberá ser consultada con los parlamentarios castellano-manchegos en una próxima reunión.La reunión, que comenzó a las diez y cuarto de la mañana, fue presidida como moderador pot Mariano Aguilar, senador, y actuó como secretario de la mesa Ignacio Camuñas, diputado de UCD. Los dos puntos más conflictivos, por diferentes razones, dentro de la asamblea, que duró dos horas y tres cuartos, fueron los referidos a la autonomía de la provincia de Madrid y su posible integración en la región castellano-manchega, de una parte, y la composición de la comisión permanente de trabajo, por otra.

Ramón Tamames, diputado del PCE, inauguró el turno de palabra para exponer la necesidad de que Madrid se integrara en esa región castellano-manchega ya apuntada, porque es esta la única forma de rediseñar una región en la que la capital ha actuado de forma centralista, succionando riqueza y puestos de trabajo. Esta idea fue apoyada en general por todos los parlamentarios, aunque fue el señor Alonso Puerta, diputado del PSOE, quien señaló que el futuro que se busca para Madrid es que sea un foco de irradiación más que de succión para esa región en la que se pretende integrarla.

El tema que con más asiduidad se trató dentro de este punto del orden del día fue la dificil andadura que le espera al futuro autonómico de Madrid, en parte por la dimensión de la provincia en cuanto a habitantes (uno de cada siete españoles vive en Madrid), y en parte por la previsible oposición que puede surgir entre los parlamentarios -castellano-manchegos a la integración de Madrid en su ente autonómico

Para el señor Ruiz Navarro, portavoz del grupo UCD, pueden diferenciarse tres clases de problemas diferentes: Madrid como municipio, Madrid como provincia y Madrid como región. «La ley especial de 1956 sobre Madrid está anticuada -dijo-, y ha per mitido que haya un claro centra lismo en el municipio de Madrid Hay distritos a los que por su entidad e importancia hay que dar una cierta autonomía. Por otra parte, se han adscrito a Madrid-municipio una serie de pueblos cercanos, de forma errónea desde mi punto de vista. » Respecto a la integración de Madrid en la región castellano-manchega, el señor Ruiz Navarro dijo que el problema de Madrid no se resolverá si se convierte en un distrito federal, «debe estar integrado en las provincias limítrofes. Puede haber oposición por parte de esas otras provincias, pero debemos tener soluciones de recambio. No nos gustaría un Madrid como ente independiente».

El señor Martínez Emperador, diputado de Alianza Popular, especificó que Madrid tiene dos aspectos diferentes, el de capitafidad y el de gran municipio. «El municipio madrileño soporta unos gastos que impone la capitalidad y unas servidumbres a la que obliga esa condición. Hay que buscar soluciones para que estas obligaciones no influyan en las provincias limítrofes. »

Tras un ruego del señor Agui lar para que los medios de comunicación fomenten un debate so bre estos puntos, matizado por el señor Alonso Puerta, y tras un breve descanso solicitado por UCD para deliberar, se pasó a la discusión de la forma en que ha quedado compuesta la comisión permanente de trabajo, que, al mismo tiempo, actuará com interlocutora de los parlamenta rios con la Coplaco.

La primera propuesta fue for mulada por el PSOE, y es la siguiente: tres representantes de UCD, tres del PSOE, dos senadores, un ntiembro del PCE, otro de AP y oiro del Grupo Mixto. Esta propuesta fue efectuada antes de que UCD solicitara tiempo para deliberar. Tras el descanso, el señor Ruiz Navarro ofreció la misma propuesta, aunque excluyendo al representante del Grupo Mixto. Donato Fuejo, diputado del mismo, elegido por el PSP en Madrid, protestó enérgicamente por la «inadmisible propuesta del señor Ruiz Navarro». En semejantes términos se expresó el señor Alonso Puerta quien, subrayando las palabras del señor Fuejo, dijo que es absurdo no considerar los tres diputados electos del PSP por Madrid. El señor Ruiz Navarro dijo que el Grupo Mixto no se había presentado como tal a las elecciones.

Después de algunas consideraciones de parlamentarios, contrarias a la propuestade UCD, el señor Camuñas, en nombre de este grupo, dijo que se aceptaba la propuesta inicial del PSOE. Sin embargo, el señor Tamames consideró que el PCE no estaba suficientemente representado con una sela persona, ya que obtuvieron un diputado más que AP y PSP en las elecciones del 15 de junio, y piopuso que el PCE tuviera dos representantes. El señor Ruiz Navarro se negó a esta pretensión, yAlonso Puerta contestó que si el PCE dejaba de obtener .un 33,3% con ese sistema, tanto UCD como PSOE, con once diputados cada uno, perdían mucho más. Finalmente, fue aceptada la propuesta del PSOE y cada grupo designó a sus representantes. Por el PSOE estarán en la comisión permanente los diputados Javier Solana, Carlota Bustelo y Alonso Puerta. Por UCD, Ignacio Camuñas, Fernando Benzo y José Luis Ruiz Navarro; por el PCE, Ramón Tamames; por el Grupo Mixto, Enrique Tierno y por AP, José Martínez Emperador. Además, se unen dos senadores, el señor Villar Arregui, con carácter permanente, y los señores Aguilar, Satrústegui y Alonso, con carácter rotatorio.

Sede itinerante

En el capítulo de ruegos y preguntas, que siguió a una breve exposición de Alonso Puerta sobre los contactos mantenidos con Coplaco por él, el señor Tamames y el señor Martínez Emperador, se acordó que la comisión permanente disponga de un local en el que reunirse y organizar una secretaría, local que se solicitará de la Diputación Provincial y, a propuesta de Iñigo Cavero, diputado de UCD por Madrid y ministro de Educación, se acordó que el Plenario de parlamentarios celebre sus asambleas en distintos pueblos de la provincia. El primero de ellos será Alcalá.