Redada policiaca en Belfast contra presuntos miembros del Sinn Fein
En un gran despliegue policíaco apoyado por unidades militares, las fuerzas de seguridad británicas detuvieron ayer en Belfast a quince presuntos miembros del Sinn Fein Provisional, del Ejército Republicano Irlandés (IRA). Algunos de los arrestados bajo la ley de Prevención del Terrorismo, que tiene vigencia en Irlanda del Norte, comparecieron por la tarde ante un juez.
En la operación, la más importante efectuada por las fuerzas británicas desde diciembre pasado, participaron más de trescientos hombres uniformados, que asaltaron domicilios particulares y la sede del Sinn Fein, partido político legal, y se incautaron de numerosos documentos. Una declaración oficial dice que los detenidos «están conectados con una investigación policial iniciada hace tiempo» que pretende esclarecer los lazos entre los provisionales del Sinn Fein y del IRA y posibles conexiones con organizaciones extranjeras.
Extrañas vinculaciones
Según fuentes oficiosas, la policía habría descubierto ya vinculaciones entre los «provisionales» del IRA -la tendencia más activa de las dos en que se halla escindido el movimiento republicano irlandés- y grupos franceses, germano-federales y de Oriente Próximo.La redada de ayer en Belfast se produce tres días antes de una anunciada manifestación organizada por el Movimiento Republicano en la capital de la provincia británica para protestar contra la retirada del status político a sus militantes.
Encarcelados por actividades terroristas en la prisión de Mazen, en el Ulster, trescientos republicanos iniciaron hace algunas semanas acciones de protesta contra su situación. El Gobierno de Londres reiteró ayer que no variará su actual política, iniciada en marzo de 1976, de negar cualquier tipo de tratamiento especial a los «convictos de terrorismo».
El Sinn Fein, por su parte, ha hecho público un comunicado en el que afirma que las condiciones del penal de Maze son tales que uno de sus militantes ha sufrido un ataque cardíaco, otros tres han sido golpeados por los guardias y un quinto sufre una infección cutánea. Según la nota de los provisionales, rechazada por las autoridades británicas, las represalias se han tomado porque los prisioneros se niegan a limpiar sus celdas como parte de sus acciones de protesta. Las condiciones sanitarias de la prisión habrían llegado ya a una situación límite.
La prisión de Maze, donde también se encuentran internados más de un centenar de extremistas protestantes, ha sido visitada esta semana por cuatro diputados unionistas y ayer mismo lo hizo el pastor Ian Paisley, líder del ultraprotestante Partido Democrático, quien ha exigido una inmediata segregación de los prisioneros «lealistas».
