El aeropuerto de la discordia
Unos trescientos manifestantes -de un número próximo a los 6.000- consiguieron el domingo romper los cordones policiales y apoderarse de la torre de control del nuevo aeropuerto de Tokio, en Narita, cuya inauguración está prevista para este jueves. El nuevo aeropuerto ha sido la causa de violentas manifestaciones promovidas durante los últimos meses por estudiantes de izquierda, ecologistas y campesinos cuyos terrenos fueron expropiados. Cinco de los manifestantes del domingo lograron entrar en el puesto de mando de la torre de control y destrozaron gran parte del valioso material de precisión que contenía. Cerca de 13.000 agentes de policía intervinieron en la operación de desalojo. En la foto, uno de los manifestantes es alcanzado por las llamas de la bomba incendiaria que se disponía a lanzar contra la policía.
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