_
_
_
_

"La mayoría actual garantiza el orden y la estabilidad"

La Unión por la Democracia Francesa (UDF) aglutina los partidos giscardianos que responden al presidente de la República Francesa, Valery Giscard d'Estaing. La creación de esta nueva formación el mes pasado, configuró definitivamente la segunda tendencia de la mayoría gubernamental que apoya al presidente.En el origen de la UDF hay que situar al actual presidente de la República y al partido del presidente, fundado por él a principios de los años sesenta y que tras su última transformación en mayo de 1977 se llama el Partido Republicano. Su secretario general, Jean Pierre Soisson, dialogó con nuestro corresponsal en París, Feliciano Fidalgo, sobre la UDF y la actualidad preelectoral francesa.

Más información
Documento sindical para conseguir un compromiso entre el PS y el PCF
Giscard plantea su estrategia de centro frente a gaullistas y comunistas

EL PAÍS: Un día, el general Charles De Gaulle dijo: «Giscard es inteligente, pero le falta el pueblo.» Teniendo en cuenta que la mitad de los franceses votan por la izquierda y que los gaullistas, en la mayoría gubernamental, se manifiestan reticentes respecto al presidente, ¿cree usted que el tiempo ha desmentido la afirmación del general?

Jean Pierre Soisson: En mayo de 1974, Valery Giscard d'Estaing llegó a la presidencia de la República gracias a una fuerte corriente nacional, reuniendo alrededor de su persona una mayoría que no ha dejado de aumentar (56% actualmente). El sufragio universal, que es la voz del pueblo, responde a todas las preguntas o apreciaciones.

EL PAÍS: A pesar de la esperanza reformista que inspiró el presidente Giscard d'Estaing, y a pesar de algunas reformas que ha realizado durante los últimos cuatro años, hoy la izquierda se encuentra al borde del poder. ¿De esta realidad, no sería culpable «la derecha más tonta del mundo» (Guy Mollet), como lo probaría, por otra parte, una fracción importante del electorado que, según los sondeos de la opinión pública, confiesa que va a votar por la izquierda «contra la derecha»?

J. P. S.: Durante la campaña electoral presidencial, Valery Giscard d'Estaing insistió en la necesidad y en su voluntad de promover «reformas en el orden», que han sido realizadas. Sí, a veces, algunos franceses han podido pensar que la izquierda sería más reformista, también saben que la realización de ese programa necesita,el orden y la estabilidad que asegura la mayoría actual.

Conocer lo que pasa fuera, es entender lo que pasará dentro, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

EL PAÍS: La mayoría de nueva asamblea será restringida; por otro lado, los gaullistas se manifiestan hostiles a la corriente giscardiana de la mayoría. ¿Qué posibilidades prevé usted, en caso de victoria de la derecha, para el futuro inmediato francés: un Gobierno estable con los gaullistas, una apertura hacia la oposición no comunista, una crisis institucional?

J. P.S.: El primer ministro, señor Barre, consideró la UDF (corriente giscardiana), «necesaria y deseable». La UDF contrapesa la influencia gaullista sin hostilidad. Si la mayoría gana, continuará gobernando normalmente, lo que no excluye una apertura hacia todos los que deseen acercarse a la política del presidente de la República que, por su parte, ya ha dicho que continuará esforzándose para ampliar la mayoría.

EL PAÍS: El señor Giscard d'Estaing les ha dicho a los franceses lo que es el «voto bueno». Y todos los líderes de la mayoría les aseguran a los franceses que la victoria de la izquierda es la vía irreversible hacia el colectivismo, muchos piensan que este planteamiento querría decir que, en Francia, no es posible la alternancia. ¿Qué piensa usted?

"En Francia, la izquierda tiene posiciones extremas"

J. P. S.: En la mayor parte de los países democráticos la alternancia no pone en entredicho la estabilidad de la sociedad, porque los valores defendidos por cada uno de los campos no son muy dispares. Las posiciones extremas de la oposición en Francia bascularían a nuestro país en el campo colectivista y, según sus propios líderes, revisarían la función del presidente de la República, que ha sido instituida por sufragio universal.EL PAÍS: Según el PCF, el número de sus militantes aumenta continuamente. ¿Cree usted, como el señor Giscard d'Estaing, que la influencia de los comunistas va a disminuir progresivamente?

J. P. S.: No es posible saber el número de militantes del PCF. Los sondeos permiten apreciar un cierto descenso de los comunistas. Por otra parte, los resultados de las elecciones, de 1945 a esta parte, prueban que su influencia ha disminuido.

EL PAÍS: ¿Qué importancia tendría el voto de los próximos días 12 y 19 en occidente, en el porvenir del Mercado Común y en Europa del Sur?

J. P. S.: Los resultados de las elecciones influirán grandemente en la política exterior y en la acción de Francia. Algunos compromisos adquiridos por Francia podrían quedar en entredicho: por ejemplo, el programa de la izquierda y el Mercado Común son totalmente incompatibles.

EL PAÍS: ¿Qué piensa usted del señor Mitterrand?

J. P. S.: El pueblo francés se ha asombrado al ver al líder de un partido que ha rechazado las invitaciones del presidente de la República y que acepta una entrevista con el presidente de Estados Unidos.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_