Atentados en la isla de Córcega

Tres atentados con bomba fueron perpetrados ayer en la isla de Córcega, sin que causaran víctimas, aunque sí daños de relativa importancia. Dos de las explosiones se produjeron en fincas cuyos propietarios residen en el territorio continental francés, y el tercero fue contra un edificio de la televisión francesa.

Por el momento nadie ha reivindicado estas acciones. Sin embargo, ayer mismo, el Frente de Liberación Nacional Corso reivindicó los ocho atentados anteriores cometidos en Córcega durante los últimos meses. Estos ocho atentados, como los perpetrados ayer, han estado dirigidos siempre contra edificios de ciudadanos que residen en el continente o contra edificios estatales.

Mientras tanto, en la capital francesa se ha abierto una polémica entre los bomberos y la Compañía de Gas de Francia sobre las responsabilidades en torno a la explosión de gas del viernes por la noche y que costó la vida a cinco personas y heridas a unas sesenta, en el céntrico distrito 16 de París. Varios edificios corren peligro de hundirse a consecuencia de la deflagración.

Para los bomberos, las responsabilidades recaen sobre las deficiencias en las instalaciones en las conducciones de gas, es decir, sobre la citada compañía, mientras esta empresa mantiene sus reservas acerca de las causas de la explosión.

Por su parte, el sindicato CFDT ha publicado un comunicado en el que exige a los poderes públicos la apertura de una minuciosa investigación para averiguar las causas del siniestro.

El alcalde de París, Jacques Chirac, suspendió ayer sus actividades políticas para ocuparse personalmente del problema creado por la catástrofe. Chirac ha felicitado a los bomberos por su «valiente intervención».