Niegan su participación en el asesinato del matrimomo Viola

La madre de Carlos Sastre Benlliure, presunto implicado en los asesinatos de José María Bultó y el matrimonio Viola, entregó a EL PAIS una carta manuscrita de su hijo, depositada en el buzón de una casa de Barcelona el pasado domingo, en la cual los presuntos implicados en el asesinato del matrimonio Viola manifiestan no haber participado en el mismo.

En el escrito no se expresa en absoluto el deseo de ponerse en manos de la justicia para averiguar definitivamente los hechos, ni tampoco aportan datos objetivos de interés. Curiosamente, contiene el siguiente párrafo: «Solicitamos de nuestros familiares que interpongan querella criminal por difamación y calumnia contra el jefe superior de Policía de Barcelona, los supuestos testimonios, y contra los periódicos que demuestren su mala voluntad no publicando a primera página el texto de esta nota, como han hecho con la nota oficial.»Así, pues, los tribunales de Justicia son para el firmante el camino para defenderse de una indemostrada parcialidad de la prensa, pero no parece que sea para él, según se desprende de su actitud, el lógico instrumento que decida fehacientemente su culpabilidad o inocencia. La contradicción que implica esta postura es evidente.

En la carta facilitada por los familiares de Carlos Sastre se dice que no tienen nada que ver en el atentado, ya que se les acusa «sin pruebas, porque no puede haberlas, de ser los autores».

Para los implicados por Ia policía en el atentado al matrimonio Viola «la existencia de unos supuestos testimonios de nuestra presencia no puede obedecer sino a la pura imaginación policial, en la clara intención de complicarnos en los hechos».

Más adelante se insiste enque «no seremos tan incautos de salir ahora a la luz pública, ya que, a más de estar aún pendiente la resolución definitiva sobre la amnistía, no nos ofrecen bastantes garantías una policía y un departamento gubernativo que no duda en atribuir falsas paternidades cuando hacen falta urgentemente víctimas propiciatorias. Es indudable que la circunstancia de vernos obligados a estar fuera de casa ha decidido a la policía a formular la falsa acusación, y así nuestra ausencia podría ser interpretada por la opinión pública como síntoma de culpabilidad».