El Comité de Fútbol Profesional ha dado otra prueba de inutilidad

La reunión que ayer debió celebrar el Comité de Fútbol Profesional se aplazó, ya que sus miembros no pudieron trasladarse a Madrid, El detalle, aunque parezca comprensible, demuestra el desinterés que existe, a nivel federativo, de una problemática tan importante y decisiva como puede ser la irregular situación jurídico-laboral del jugador profesional.Se trata de una manifestación más del desprecio olímpico que se hace al jugador por parte de unos hombres, que, en su mayoría, solamente se preocupan de figurar con determinados cargos, pero que, a la hora de trabajar, aplazan sesiones de trabajo. No es, por tanto, extraño que el presidente de la Federación Española, ante esta actitud, prefiera dejar su cargo, para cuyo desempeño cuenta con colaboradores de esta clase.

Forman el Comité de Fútbol Profesional, cuya constitución ya fue discutida precisamente por la clase de hombres que llegaron a él, el presidente del Santander, que, también preside este comité, y como miembros, los también presidentes del Salamanca y Valladolid, los vicepresidentes del Madrid, Muñoz Lusarreta, y del Oviedo, y los directivos del Español, Antonio Varó, y del Sevilla Atlético -lo que es decir el Sevilla-, Manuel Rodríguez. Fernando Vara del Rey, asesor jurídico de la Federación, fue designado como secretario del comité, pero ante el panorama que se presentaba prefirió que se ocupase de ese cometido otra persona relacionada con el fútbol de alguna manera, Lorenzo Martínez-Fresneda, que no nos extrañará demasiado siga los mismos pasos.

Lógica, por tanto, y hasta defendible, la postura de los jugadores, no sólo al constituir una Asociación Española, sino también desconocer a todos los niveles la existencia de ese comité, que, por lo que se ve, solamente cuenta con el nombre. ¿Qué se puede esperar de un comité que obra de esta manera?