Nuevo edificio de la embajada española en la URSS
La embajada de España en la URSS contará próximamente con edificio propio en uno de los barrios residenciales de Moscú. En un antiguo y amplio palacete de dos plantas, actualmente deshabitado, de la calle de Gerchena, se acondicionarán todos los servicios de la cancillería, consulado, delegación comercial, viviendas para los diplomáticos, una amplia biblioteca abierta al público y un salón de actos donde se pretende mantener constantemente exposiciones de artistas españoles y celebrar veladas culturales. «Queremos que la embajada sea la casa de todos los españoles», afirmó ayer, el embajador Juan Antonio Samaranch ante Promosov, alcalde de Moscú, a quien ofreció un almuerzo.En la actualidad las condiciones de trabajo de los diplomáticos españoles son penosas. La embajada está alojada, provisionalmente, en poco más de cien metros cuadrados en los bajos de una casa de viviendas particulares, lejos del centro de la capital. En el plazo de año y medio, tal vez antes, se acondicionará el nuevo edificio.
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