Comunicado denunciando los traslados de reclusos en Córdoba

El malestar continúa en el centro de cumplimiento penitenciario de Córdoba, a pesar de declaraciones triunfalistas de la dirección del mismo en el traslado, parece ser que a Ocaña, Carabanchel y Alcalá, de veintidós reclusos, entre los que están los políticos del GRAPO y FRAP, en número de doce, de forma que sólo permanecen con dicho status Trillas Farré y Blanco Chivite -éste nuevamente sancionado con seis y doce días de celdas de aislamiento, «no existen las celdas de castigo» ha dicho el director a una emisora local- y el resto, hasta los veintidós, de reclusos sociales líderes de la Copel.

El resto de miembros de esta Coordinadora de Presos en Lucha ha conseguido dirigir a la opinión pública el siguiente comunicado en el que, entre otras cosas, señala que:

«Una vez más, la única solución que ofrece el Gobierno y la Dirección General de Instituciones Penitenciarias a nuestra justas reivindicaciones es la represión. Cuando el Gobierno se vio obligado a reconocer, tras el motín de Carabanchel y otras muchas prisiones del Estado, la necesidad de cambiar la actual situación; cuando de forma implícita se admite la justeza de nuestras demandas y se anuncia públicamente la reforma del reglamento penitenciario, la anulación de sanciones, y la necesidad de una ley Penitenciaria, que aborde en profundidad la reforma que nosotros venimos reclamando, cuando todo esto lo está diciendo el propio Gobierno a través de los medios de difusión, la realidad es que en todas las cárceles del Estado se ha iniciado una salvaje represión contra los hombres que exigen se les dé tratamiento humano y justo, y se mejoren sus condiciones de vida.»