Atlético e Inter, finalistas del Carranza
Como de excelente se puede calificar el partido que el Atlético de Madrid realizó frente al Vasco de Gama. Jugó sin dejar hacerlo al contrario, se mostró fuerte en defensa, creador en el centro del campo y acertado en la punta, merced al batallar de Rubén Cano. El Vasco de Gama, a raíz de encajar el primer gol fue a menos porque su rival se creció sobre el terreno de juego.El equipo brasileño era un conjunto muy difícil a priori. Unía la técnica con la velocidad, y en los primeros compases del encuentro puso en aprietos al Atlético. Las primeras ovaciones fueron para el Vasco, por tiros espeluznantes de sus delanteros en cuanto tenían el menor hueco para ensayar el disparo. El gol del Atlético paralizó el brillante juego que realizaba el Vasco de Gama. Los rojiblancos adquirieron confianza y plantearon seria batalla en el centro del campo. El dominio fue muy nivelado a lo largo del partido, y el Atlético en ningún momento buscó defender su ventaja. Persistió en su sistema táctico y eso destrozó a los brasileños, porque tenían la obligación de buscar el gol sin descuidar nunca los marcajes, ya que su rival siempre estaba atento al contraataque.
El Atlético se mostró como un conjunto fuerte y sólido, simplemente por el hecho de que nunca cedió terreno. La cobertura le apoyó en los aciertos de Marcelino y Pereira, verdaderos valladares y que además dieron abundante juego a la línea media. En ella, Marcial cuajó un gran encuentro, acompañado siempre de Robi y de Leal. Delante, Aguilar y Ayala no se mostraron tan acertados como Rubén Cano, a pesar de que este jugador falló sus buenas ocasiones de marcar.
En la primera parte, el Atlético denotó una mayor peligrosidad que el Vasco de Gama. El árbitro se dejó sin sancionar una zancadilla a Aguilar dentro del área, y este mismo jugador tiraría más tarde al poste. Por parte de los brasileños, la mejor ocasión de marcar la tuvieron en un disparo al larguero de Orlando.
Siguió el Atlético muy entero en la segunda parte, dosificando sus fuerzas, sin que ello quiera decir que no corriera tanto como su rival. Las buenas ocasiones de marcar en este período corrieron a cargo del Vasco de Gama, pero, Tirapu dejó patente que tiene sitio en el primer equipo. Los últimos minutos del partido evidenciaron que el Atlético sigue siendo maestro en el contraataque, si bien la retaguardia brasileña no marcó muy encima a los atléticos, al estar en exceso adelantada en busca de aminorar diferencias.
Gustó mucho el conjunto madrileño, porque superó a un equipo que tiene como objetivo el crear fútbol, no destruirlo. El Atlético empleó la. misma táctica y demostró ampliamente que era el mejor. Frente al Inter, quizá las cosas sean más difíciles. Los italianos corrieron bastante menos ayer, y su juego no es creativo. El Atlético, en la final, con televisión en directo, tendrá que hacerlo todo.
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