Neofascistas e izquierdistas se enfrentan en el sureste de Londres
Manifestantes de izquierdas y de derechas, y policías británicos, protagonizaron ayer en el sudeste de Londres, una de las jornadas de violencia más espectaculares de los últimos años en Inglaterra. Hubo doscientos detenidos, sobre todo, entre las filas izquierdistas y se produjeron cien heridos, tanto entre los manifestantes de derechas como entre sus oponentes y la policía. Los izquierdistas usaron amoníaco y varios objetos contundentes en sus enfrentamientos con la policía y ésta respondió usando su nuevo equipo antidisturbios, que incluye cascos, viseras y escudos protectores, una novedad para las fuerzas de seguridad de este país.Los manifestantes de derechas, algo más de un millar, eran miembros de una organización neofascista, el «Frente Nacional», que había escogido uno de los barrios del sur de Londres, Lewishal, para pedir la expulsión de los dos millones de inmigrantes de color que hay en el Reino Unido. Lewishal es una de las áreas de la capital británica donde existe una mayor concentración de tales inmigrantes, la mayor parte de los cuales proceden de antiguas colonias del Reino Unido.
Cuatro mil policías
La manifestación de ayer había sido permitida por la policía a pesar de la protesta de organismos favorables a la integración racial y contrarios al National Front. Grupos antirracistas se manifestaron por la mañana antes de que el «Frente Nacional» iniciara su marcha. Cuando ésta comenzó, miembros de distintos grupos de izquierdas avanzaron hacia los racistas y allí estallaron los disturbios.Frente a cerca de 4.000 policías, a pie y a caballo, hubo unos 5.000 manifestantes contrarios al «Frente Nacional». Las fuerzas de segundad intentaron mantener separados a ambos grupos, pero la tarea fue imposible y el encontronazo produjo una verdadera batalla campal, que implicó a todas las fuerzas en conflicto y hubo patadas, pedradas, lanzamientos de botellas llenas de amoníaco y dos policías, entre el centenar de heridos que hubo en los tres bandos, tuvieron que ser asistidos por haber recibido esta sustancia en sus ojos.
El National Front, la organización neofascista cuya manifestación estuvo en el centro de los disturbios de ayer, se fundó a principios de esta década y lleva a cabo una constante campaña contra las gentes de color en este país. En este momento, es el cuarto partido político de Gran Bretaña. Sus apariciones públicas van siempre acompañadas de disturbios, no sólo por su propia naturaleza racista, sino porque otros grupos de izquierdas suelen organizar marchas para contrarrestar estas campanas del National Front, cuyos líderes repiten que los problemas de desempleo y de vivienda que hay en Gran Bretaña se resolverían repatriando a los emigrantes contra los que se manifiestan.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.