La Academia Gallega de Jurisprudencia prepara un estatuto de autonomía
Dentro de tres semanas estará concluido el anteproyecto de estatuto de autonomía de Galicia que elabora en estos momentos la Academia Gallega de Jurisprudencia y Legislación. Se refuerza por tanto una vez más el tema de la autonomía gallega, que aparece ya definitivamente asumido por las fuerzas políticas que obtuvieron escaños en las Cortes.
La reivindicación autonómica fue presentada tomando como punto de partida el estatuto de 1936, principalmente por el Partido Comunista Galego, que se enfrentó a las fuerzas políticas más nacionalistas cuando estas reivindicaron de entrada la autodeterminación de Galicia. Sin embargo, la derrota electoral sufrida por los comunistas de Santiago Alvarez significó un claro giro a la derecha en las banderas autonómicas. Ahora son claramente la Unión de Centro Democrático y el Partido Socialista Obrero Español quienes enarbolan la autonomía y van a ser sin duda sus diputados y senadores los que configuren su posible advenimiento. El Partido Comunista perdió definitivamente el protagonismo que antes tuvo en este aspecto y no faltará quien piense que tendrá que conformarse en el futuro inmediato con asumir un papel de presión indirecta.La iniciativa de redactar inmediatamente un anteproyecto de estatuto parte de la Academia Gallega de Jurisprudencia y Legislación, cuyo presidente, Manuel Iglesias Corral, es senador por la Candidatura Democrática Galega, que apoyaron varios partidos de la izquierda. Estará terminado para el próximo 2 de septiembre y en su elaboración participarán unos veinte juristas gallegos, repartidos en tres comisiones encargadas de articular las disposiciones generales, las orgánicas o políticas, hacienda y asuntos económicos. «Se trata -declaró un portavoz de la Academia- de facilitar el trabajo de los políticos y de no interferir sus competencias. Queremos servir a Galicia a través de sus representantes.»
En la elaboración del anteproyecto se tendrá en cuenta el estatuto de 1936, pero con perspectivas de trabajo que irán más allá al contemplar los planteamientos de 1977, muy distintos sin duda a los anteriores. Según declararon sus promotores, será con toda seguridad un estatuto de autonomía mucho más progresivo que el de 1936. En opinión de la Academia que lo promueve, de lo que se trata ahora es de aportar las bases jurídico-políticas de la futura autonomía y que sean luego los parlamentarios gallegos quienes se ocupen de establecer su aplicación. Los partidos políticos podrán presentar ideas y sugerencias, ya que la comisión redactora se mostró abierta a su recepción.
Entre los promotores del anteproyecto figura un antiguo redactor del estatuto de autonomía de 1936, el señor Iglesias Corral, presidente de la Academia y senador, y un senador por la UCD, Antonio Rosón Pérez. En principio cabe suponer que esta idea puede muy bien ser apoyada por UCD, por el PSOE y Partido Comunista Galego. El PT y la ORT no estarían tampoco en contra.
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