El Salamanca se adjudicó el trofeo de La Línea

El Salamanca se adjudicó el Trofeo Ciudad de La Línea, al vencer, en un lamentable encuentro, al Nacional de Montevideo por cuatro goles a dos. El choque final tuvo como protagonista al colegiado castellano. De Sosa Martín, que mostró catorce tarjetas amarillas y, nada menos que seis rojas, cinco de ellas para los jugadores suramericanos. El mal juego y la dureza compartieron honores con el colegiado.Salamanca y Nacional habían llegado a la final tras eliminar a Stoke City y Cádiz, respectivamente. El partido comenzó con un gol tempranero del conjunto uruguayo, conseguido por Mameli al minuto de juego enjugada dudosa. Puede decirse que aquí comenzó el desagradable espectáculo. Los jugadores uruguayos asustaban por sus fortísimas entradas. El colegiado, intentando cortar el durísimo juego de los hombres del Nacional, se pasó tal vez en este afán. Montero Castillo fue el primero en irse a los vestuarios. Antes de llegar el descanso, De Sosa expulsó también a Moller y Taborda.

En la reanudación, el Salamanca, amparado en estas tres sensibles bajas, de¡ contrario forzó su ofensiva y Tomé logró el empate en el minuto cinco. Dos minutos más tarde, Báez adelantó al Salamanca. Juanito, de penaltie y Ameijenda marcaron los otros dos tantos charros. Carrasco cerró la cuenta para los uruguayos. Mientras, ya se habían producido nuevas expulsiones motivadas por la rigurosidad del árbitro. Albaladejo, por parte salmantina, y Ocampo y Bica, por el lado uruguayo, tampoco acabaron el partido. En resumen, desagradable espectáculo.

En el encuentro de consolación, el conjunto inglés de¡ Stoke City se impuso al Cádiz por dos goles a uno, adjudicándose así el tercer puesto.

Enrique Mateos, amenazado con el cese

Si el Torpeo acabó con problemas, éstos comenzaron ya para el Cádiz, antes de su primer partido con el Nacional. Los jugadores gaditanos, tras mantener una reunión, solicitaron de la directiva un aumento de la prima estipulada por ganar en La Línea. Enrique Mateos se puso al lado de sus hombres, y esto motivó que el presidente le amenazase con el cese fulminante. De momento, la junta directiva del Cádiz ha denunciado a la Federación Española de Fútbol, a través del organismo federativo andaluz, a los jugadores y al propio entrenador por este incidente que se considera por la directiva gaditana, muy grave. El Cádiz se hubiese visto obligado a indemnizar a la comisión organizadora con cinco millones si sus jugadores se hubiesen negado, como así era en un principio, a jugar los partidos del torneo.