"Tiempos Nuevos" da marcha atrás en sus críticas al eurocomunismo

La revista soviética Tiempos Nuevos inserta, en su último número, un tercer comentario sobre el tema del eurocomunismo, pero que se diferencia notablemente de los anteriores en lo que parece un claro deseo de los soviéticos de atemperar los debates sobre el tema a raíz de su ataque personal contra el secretario general del Partido Comunista de España (PCE), Santiago Cárrillo.Tiempos Nuevos dice en esta ocasión, que «los partidos comunistas europeos son completamente independientes de Moscú, y este hecho no supone ninguna desconfianza hacia ellos».

«El PCUS (PC de la URSS) -Sigue comentando la revista-, conforme lo atestiguan. numerosos documentos, tiene una confianza total en sus hermanos de clase, en sus camaradas de lucha, en los comunistas, en fin, de los países capitalistas desarrolla' dos.» «Cualesquiera que sean los cambios operados, en los últimos años, en la relación de fuerzas en el mundo, el respeto del PCUS hacia los comunistas y el movi miento obrero en los países de la Europa occidental permanece inalterable.» El semanario recurre a una cita de Lenin, un año después de la revolución de octubre, que se re fería a «la principal esperanza para nosotros es que el proleta riado de los países europeos occi dentales más avanzados», alegrándose de que «se pusiera en movimiento este importante apoyo a la revolución mundial». La revista añade que «sonlos internacionalistas y nos alegra mos de todos los éxitos de los partidos hermanos y lamentamos sus fracasos como si fueran nuestros. Apreciamos altamente sus avances en el desarrollo de la clase obrera y les damos todo el apoyo posible».

El órgano oficioso del Ministe rio soviético de Asuntos Exteriores agrega que «no existen problemas de reconocimiento de la independencia de los partidos comunistas de cada país. El respeto a la autonomía de los partidos hermanos y la cooperación con ellos sobre la base de una verdadera igualdad es política mantenida desde antiguo por el Pesoviético».

En una clara mención al trato dado por la prensa occidental a la disputa entre el Krenilin y Carrillo, Tiempos Nuevos añade que «los ecos esparcidos por la propaganda occidental sobre cierta desconfianza de Moscú hacia los partidos comunistas europeos no tiene otra intención que la de desunir a los comunistas».

El comentario finaliza diciendo que las divergencias entre partidos comunistas tienen como objetivo «determinar la mejor manera de evitar al pueblo un régimen explotador y la mejor manera de poner en práctica los ideales humanistas del socialismo».