Estallan varios artefactos en Cataluña

A lo largo del domingo, fueron arrojados artefactos incendiarios en diversas localidades de la costa catalana que afectaron principalmente a turismos con matrícula extranjera. Los hechos de mayor trascendencia se produjeron en Sitges donde, a partir de las siete de la mañana, fueron arrojados ocho cócteles molotov contra otros tantos turismos de matrícula francesa, seis de los cuales quedaron totalmente destruidos, mientras los otros dos no sufrieron apenas daños. En todos los casos intervinieron los bomberos de la Diputación provincial que extinguieron rápidamente las llamas.

Asimismo, en la localidad tarraconense de Comarruga, se lanzaron también cócteles molotov, aproximadamente a la misma hora, contra un aparthotel, que no llegó a estallar; contra un hostal situado en la playa, que sufrió algunos daños en su puerta trasera, y contra un turismo de matrícula extranjera. Este último artefacto tampoco llegó a explosionar.

Por último a las once de la mañana en Castelldefels, a pocos kilómetros de Barcelona, también fue arrojado un cóctel contra otro automóvil. El vehículo resultó destruido.

Según parece, los autores de los atentados registrados en Sitges podrían ser dos jóvenes que no han sido identificados. La coincidencia de las tres actuaciones y la identidad en los objetivos -establecimientos y lugares turísticos y automóviles extranjeros- hace sospechar que pueda tratarse de una campaña dirigida contra la llegada de turistas a nuestro país.

La "Guerrilla Roja" reivindica los atentados

Sobre las nueve y media de la noche de hoy, una voz masculina dijo telefónicamente a Europa Press, en Barcelona, que la Guerrilla Roja -denominación totalmente desconocida hasta ahora- reivindica la destrucción de turismos de matrícula francesa mediante cócteles Molotov, que ha tenido lugar esta madrugada en algunos puntos de la costa catalana.El comunicante dio lectura al siguiente comunicado en castellano: «Con fecha de 26 de junio de 1977, la Guerrilla Roja ha destruido veinte coches turismo y un autocar de matrículas francesas, en las localidades catalanas de Comarruga, Calafell, Sitges, Castelldefels, Callela y Arenys de Mar.»

«Se trata solamente de una advertencía. En el caso de que el Gobierno francés entregue al Gobierno español al antifascista y patriota vasco Miguel Angel Apaletegui, la Guerrilla Roja iniciará una escalada de represalias contra el turismo y los intereses económicos franceses dentro del Estado español.»

Un redactor de Europa Press preguntó al comunicante sobre la tendencia ideológica del grupo, a lo que respondió que «nuestro propio nombre lleva implícita nuestra ideología ».

Asimismo, se le preguntó si la Guerrilla Roja reivindicaba igualmente el lanzamiento de dos cócteles Molotov contra un almacén de chatarra propiedad de un súbdito francés en Vilaseca esta madrugada, que originó daños leves.

El comunicante dijo que«nosotros sólo reivindicamos lo de los coches y lo del autocar, como se indica en el comunicado. Respecto a otras cosas -añadió-, no podemos decir nada». A continuación, colgó el teléfono.