Próxima reunión en Bruselas de los PC occidentales

La Conferencia de Partidos Comunistas Europeos Occidentales, que se celebrará en Bruselas el próximo día 20, significará la primera prueba de fuerza ante la opinión pública entre la línea «eurocomunista» y Moscú.Hasta el momento, los PC de Dinamarca, República Federal de Alemania (RFA) y Austria han recibido ya una «nota de instrucciones» del secretario del comité central del Partido Comunista soviético (PCUS), Ponomariev, encargado de las relaciones entre su partido y los de otros países.

En la campaña de «reaproximación» de los eurocomunistas, cooperará intensivamente, durante los próximos días, el secretario del PC checoslovaco, Bilak, que se trasladará a Viena esta semana para celebrar una reunión con los comunistas austríacos, con vistas a la «cumbre» de Bruselas.La actitud de Bilak ha quedado reflejada previamente en un artículo suyo que aparece en la revista soviética Voprossy Historie. En este artículo, Bilak hace suya la doctrina del presidente búlgaro Schiwkoff sobre el eurocomunismo, al que califica de «arma de la burguesía contra la unidad comunista».

El diario Rude Pravo, de Praga, ha reproducido este escrito ampliamente. La posición checa, búlgara y soviética no coincide con las adoptadas días pasados por el jefe del PC húngaro, Kadar, en Roma, y por Ceaucescu, de Rumania, en Berlín, lo cual parece indicar que Moscú está dispuesto a «neutralizar» en lo posible la reunión de Bruselas, cuya incidencia sobre los PC más autonomistas del bloque oriental se haría sentir muy pronto.

Según parece, Moscú teme que en la conferencia de Belgrado se imponga una corrección al curso establecido en las anteriores de Sofia, a comienzos del pasado mes de marzo, y de Praga, en abril.Tras la polémica entre el periódico del PC italianqL'Unita y Pravda, de Moscú, en la que aquel acusaba a Moscú de tratar de convertir en «quinta columna contra el eurocomunismo» a los partidos de la RFA, Dinamarca y Austria, se produjo una intensa corriente en tomo a los tres partidos occidentales citados, con el fin de proyectarlos sobre una u otra opción: la soviética o la occidental. Según previsiones, en Bruselas quedará suficientemente clarificado el rumbo que adoptarán los tres PC en conflicto.