Encarcelado el ex presidente de la ESSO italiana

Vicenzo Cazzaniga, de setenta años de edad y uno de los más conocidos financieros italianos, fue detenido en Roma por apropiación indebida y falsificación de balances, en relación con el tiempo que estuvo en la presidencia de la ESSO italiana.La denuncia, parece ser, fue hecha por los propios dirigentes de la filial italiana de la ESSO norteamericana, una vez revisadas las actividades de Cazzaniga durante su etapa presidencial.

Según fuentes financieras, el ex presidente había ocultado a sus accionistas que una de sus filiales, la Stanic, había obtenido un crédito con muchas facilidades por más de 1,5 millones de dólares, el haber establecido acuerdos secretos con una empresa del Ente Nacional de Hidrocarburos (ENI) y por haberse apropiado durante su gestión presidencial de 3.200 millones de pesetas.

La presidencia de Cazzaniga en la ESSO italiana se prolongó veinte años, hasta 1971, y la había compartido con otros altos cargos de las finanzas italianas, como consejero del Banco de América e Italia y de la Minnesota italiana, así como presidente de la Unión Petrolífera, en la que se agrupan todas las compañías del sector de los hidrocarburos.

Caballero de Trabajo -una de las más altas condecoraciones italianas-, Cazzaniga ha ocupado puestos de responsabilidad en dos grandes sociedades italianas: Bastogi y Montedison.

Su nombre apareció en la crónica negra, en relación con el escándalo de los petroleros, es decir, las subvenciones a fondo perdido que las compañías petrolíferas distribuían entre los partidos políticos y otros sectores de la vida pública italiana. El financiero fue acusado por los jueces instructores del sumario como el enlace entre los petroleros y el mundo político, así como el pagador de más de dos millones de dólares (140 millones de pesetas) para hacer cambiar la política energética del Gobierno, eligiendo centrales térmicas en lugar de nucleares.