Los nacionalistas radicales gallegos, enfrentados
Todo hace suponer que el debate actualmente abierto a ciertos niveles entre las distintas fuerzas políticas gallegas está a punto de concretarse en propuestas determinadas. Sin duda alguna, el hecho más sensacional podría derivarse de la crítica interna que, según pudo saber EL PAIS, se está llevando a cabo desde las bases de la Unión do Pobo Galego -(UPG) y la Asamblea Nacional Popular Galega (ANPG).
Concretamente este corresponsal puede afirmar que durante los últimos días un número considerable, tanto cualitativa comocuantitativamente de militantes de la ANPG, firmaron
un escrito en el que desde posiciones políticas no coincidentes manifiestan su actitud de
repulsa por lo que consideran actitud de ignorancia de lat di
recci . ón de su organización
política sobre las críticas que le
fueron formuladas contra la
dictadura que supuestamente
viene ejerciendo la línea pe
queño-burguesa patriótica, con
apoyo en la falta de democracia
interna,y en la marginación de
quienes asumen la autodeterS minación de Galicia.Como condición para que en la AN PG pueda seguir habiendo comunistas se pediría en este documento la adopción de un programa que pueda ser aceptado por todas las tendencias existentes en el seno de la organización, incluida la comunista. La opinión de los contestatarios de la actual dirección es que para la redacción previa de un proyecto de programa deberían ser consultados todos los elementos que de alguina manerarepresentan posiciones políticas independientes. '
Otra petición importante es que se elaboren mediante consultas y decisiones de base los estatutos que garanticen la. plena democracia in~erna reconociendo el libre derecho de las tendencias que puedan organizarse y defenderse en público.
El documento no ha pasado hasta ahora del umbral de ciertos medios políticos nacionalistas, pero todo indica que se trata de una de las más profundas críticas que se han hecho hasta el momento a la política practicada,por las direcciones de la ANPG y de la UPG. Es probable que una vez conocido ampliamente, produzca efectos inmediatos que pudieran incluso resultar inesperados. Sobre todo si se tiene en cuenta el hecho, confirmado por EL PAIS, de que una crítica semejante y mucho más amplia está surgiendo desde dentro de la propia Unión do Pobo G alego. Si a esto se unen determinadas crisis internas que sufren las bases de otros partidos gallegos,. no resulta impensable considerar que podrían cambiar sensibleinente algunos rumbos políticos (le la actual oposición gallega.
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