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Aclarados los motivos del doble asesinato

No parece que existan dudas sobre el motivo del doble asesinato cometido el lunes en la clínica de Los Nardos, ya que tanto familiares como vecinos del presunto homicida informaron durante el día de ayer que, a pesar del carácter serio y reservado, Mariano Jiménez García, de 46 años, soltero y agricultor, podía estar algo traumatizado por la operación de tabique nasal sufrida.

Según uno de los convecinos de Fuensalida, pueblo de Toledo en donde vivía, la familia recibía el apodo de los narizones. Esto pudo motivar que el pasado 30 de marzo el señor Jiménez fuera operado por el doctor Vázquez Añón del tabique nasal. Sin embargo, la intervención no le convenció, y el pasado mes de diciembre se puso de nuevo en manos del especialista en cirugía maxilofacial, con el mismo resultado.Según informaron fuentes policiales, el primer cargador usado por el homicida fue encontrado en la habitación de la consulta; sin embargo, la pistola usada, de calibre nueve parabellum, no pudo ser hallada ni en el despacho de Los Nardos ni en el coche en el que se estrelló, motivo por el que se cree que debió de tirarla en la autopista de La Coruña.

Versiones sin confirmar informaron a EL PAIS que la enfermera sobreviviente, Pilar Simón, intentó encerrarse en los lavabos, a pesar de estar ya herida. Ante esta reacción, el asesino disparó a través de la puerta las últimas balas.

Entierro de las víctimas

Ayer fueron entetrados en el pueblo de Canencia de la Sierra, Madrid, los restos mortales del doctor Vázquez Añón, fallecido anteayer como consecuencia de los disparos recibidos en su despacho cuando pasaba consulta. El cuerpo, que había sido trasladado al Instituto Anatómico Forense para su autopsia, fue acompañado durante la mañana por algunos familiares y amigos. Su mujer e hijos no asistieron, sin embargo, a la capilla ardiente, ya que, como informaron algunos de los asistentes, habían preferido esperar al fallecido en el chalé El Molino, de la citada localidad, donde el médico iba a ser enterrado y en donde descansaba con su familia durante los fines de semana.Según informaron en el mismo Instituto, el cuerpo de la enfermera Pilar Cantos, muerta en el mismo atentado, saldrá hoy sobre las diez y cuarto de la mañana para recibir sepultura en un cementerio madrileño. Funcionarios del mismo centro ampliaron a EL PAIS que los familiares del presunto asesino, que falleció horas después de sucedidos los hechos, como consecuencia de un accidente,de automóvil, no se habían presentado por el momento para hacerse cargo del cadáver.

Nota de los médicos

Una nota de la Federación Nacional de Sindicatos Médicos Libres fue hecha pública ayer para expresar su profundo pesar por los asesinatos de sus compañeros y mostrar su repulsa ante estos actos que «no admiten justificación».Fuentes médicas de la clínica Los Nardos informaron asimismo, a última hora de ayer, que el estado de Pilar Simón continuaba siendo de gravedad, aunque desde la mañana de ayer se había experimentado cierta mejoría que daba esperanzas al personal médico.

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