Mínima victoria del Rayo
El domingo perdió en Vallecas el mejor eqUipo que hasta la fecha pasó por allí. El Oviedo, con-un juego de cierta calidad, perdió de penalti pero tuvo que rendirse ante la practicidad del Rayo.Vallecano que a su vez desperd;ció otro máximo castigo y tres claras ocasiones de aumentar el marcador. No obstante, la iniciativa del encuentro fue llevada por los asturianos que sólo tuvieron una gran oportunidad de marcar, todavía con el 0-0, neutralizada por Alcázar.El Rayo Vallecano, como es costumbre, no jugó bonito. Confió en su poderosísima defensa y luchó con fuerza en el centro del campo para contrarrestar la técnica del rival; sus ataques quedaron reducidos a los aciertos en el contragolpe de los hombres punta. Por,contra, el Oviedo, conocedor de lo que se jugaba en la contienda, nuncabuscó el empate sino la victoria con un juego abierto por los extremos.
El inmenso barrizal que era Vallecas perjudicó eljuego de ambos, porque los dos equipos trataron de hacer fútbol. El Oviedo mostró sus ambiciones desdé los primeros minutos con bastante peligro, que se iniciaba en los extremos y quedaba abortado en el centro. Mucho esfuerzo le costó al Rayo equilibrar esta diferencia y a base de correr y poderío físico mediada la primera parte llegó a mandar con cierta autoridad en la'zoná ancha del campo. Llegó entonces la primera gran oportunidad de marcar para el Rayo en un balón que por lo resbaladizo del terreno de juego no pudo cortar Vicente y llegó a poder del solitario González que tiró fuerá. También-en esta primera parte el óviedo desperdició su primera y única oportunidad de marcar. Fue a falta de un minuto para eldescanso y lajugada nació en un lío -)roducido por- el barrizal, del que salió con ventaja. E. Galán. envió a Ortuondo y el centro -de éste lo remató el mismo Galán de cabeza y desde cerca con desvío inverosímil de Alcázar a córner.
En la segunda parte, el Rayo salió con mucha fuerza y se volvó sobre el Oviedo. Pronto llegó el penalti y dos minutos después el árbitro selañó otro en un empujón de Laguna a Alvarito que éste se encargó de exagerar. Francisco en esta ocasion quiso lanzarlo al lado contrario y Dujkovic consiguió detenerlo aun con ciertas dificultades. La gran oportunidad de dejar prácticamente sentenciado el partido se dejó pasar y el Oviedo comenzó a ejercer un claro dominio pero sin resultado positivo.
El Rayo se limitó a contraatacar a los 66 minutos un fallo de Iriarte fue aprovechado por González que escapó y se plantó solo ante el meta yugoslavo. Su tiro, con efecto, iba camino de la red pero el barrizal hizo que lo perdiera y el balón salió fuera' ajustadísimo al poste. A falta de dos minutos para concluir el encuentro Rial lanzó un balón servido por González en un nuevo contraataque local.
A pesar de la derrota gustó el Oviedo que ya ha perdido contacto. con el grupo de cabeza que aspira al ascenso. E. Galán -fue elconstructor y rematador más eficáz y brillante de su equipo y Mariano acusó su larga inactividad. Por su parte, el Rayo ya tiene tantos puntos-como el que más y sujuego, sin excesiva brillantez, es terriblemente práctico. Su clasificación así lo dice.
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