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Entrevista de Areilza y Cabanillas con Ruiz Giménez y Fernández Ordóñez

El primer día de vida del Centro Democrático estuvo marcado por un sinfín de cábalas, contactos y comentarios sobre el alcance de la operación y las posibilidades de que sus promotores —el Partido Popular, esencialmente— logren nuevas adhesiones, concretamente entre grupos democristianos y socialdemócratas.

De momento la reacción de la Federación Popular Democrática, que preside el señor Gil RobIes, puede calificarse de tormentosa. Tanto el presidente de dicho partido como diferentes niveles de dirección del mismo expresaron ayer su negativa a entrar en la operación centrista ya mencionada, al mismo tiempo que reafirmaron su postura de oposición. La posibilidad de una entrevista con los señores Areilza y Cabanillas no parece interesar al señor Gil Robles. Fuentes de su partido se han mostrado notablemente críticas respecto al confusionismo que, en su criterio, intenta crear el Centro Democrático.

En la tarde de ayer, José María de Areilza y Pío Cabanillas, del Partido Popular, se entrevistaron con Joaquín Ruiz-Giménez, presidente de Izquierda Democrática, y Francisco Fernández Ordóñez, presidente de la Federación Socialdemócrata. No ha trascendido el contenido concreto de la conversación, pero fuentes dignas de crédito nos han asegurado que fue cordial.

Parece que Ruiz-Giménez pidió ciertas aclaraciones y, en cualquier caso, aplazó toda posible decisión a las deliberaciones que próximamente mantendrán los órganos de dirección de su partido. Una decisión similar fue también la del señor Fernández Ordóñez. A este respecto puede decirse que el Equipo Demócrata Cristiana se reunirá el próximo día 24, e Izquierda Democrática -uno de sus miembros- lo hará, además, el día 30. En cuanto a la Federación Socialdemócrata, celebrará una reunión el día 25.

«Golpe de mano» en el centro

Además de la reunión del Equipo Demócrata Cristiano, ya mencionada, existe otra convocatoria para el mismo día 24. Si de aquí al lunes se mantiene, esta otra ha de reunir a los mismos liberales, socialdemócratas, democristianos y Partido Popular que venían manteniendo contactos desde hace semanas.

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Hace ya tiempo venía estudiándose la posibilidad de una alianza de fuerzas moderadas, por medio de reuniones en las que participaban representantes de los sectores arriba mencionados. Dicho provecto no había avanzado gran cosa, y en estas sesiones los representantes del Partido Popular se encontraban un tanto incómodos, ya que, al parecer, se les consideraba demasiado a la derecha.

En estas circunstancias, el Partido Popular y el grupo liberal que dirige Joaquín Garrigues Walter saltan por su cuenta con un pacto electoral, en compañía del partido que dirige Ignacio Camuñes: rápidamente, el primero de ellos se federa con UDE, y horas más tarde se les adhieren el Partido Popular Demócrata Cristiano (Alvarez de Miranda) y el Partido Liberal, de Enrique Larroque (que precisamente ayer formalizó su pacto con aquéllos).En cuestión de días, y con una convocatoria todavía pendiente para el día 24, la situación ha cambiado de manera casi espectacular.

La rapidez en la acción del Partido Popular, motor de dicha operación, le ha permitido formar el Centro Democrático con los grupos ya conocidos. La incógnita está en saber si se extenderá más o quedará limitado a lo que ya ha hecho. Si se tienen en cuenta, además, los contactos y negociaciones de los socialdemócratas y algunos grupos socialistas - que se recogen en otro lugar de esta misma página- resulta fácil deducir que el actual nivel de ebullición política no tiene casi precedentes.

Todo el espacio político comprendido entre la Alianza Popular, por la derecha, y el PSOE, por la izquierda -excluidos ambos-, se encuentran en plenas negociaciones, cuyo final es difícil aventurar. El Centro Democrático, ya constituido, aparece por ahora como una alternativa de centro-derecha, y consta, en círculos dignos de varios dirigentes democristianos y socialdemócratas de considerar, al menos, la oferta de negociación hecha por aquel.

Otros dirigentes, por el contrario, provectan alternativas diferentes. En los próximos días, mientras los líderes del Partido Popular viajan a Sevilla y Extremadura - donde celebrarán varios actos-, habrá que estar atentos en Madrid al posible contraatache del partido que preside Gil Robles.

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