El sindicalismo quiere garantías económicas para la democracia

Las centrales sindicales CCOO, UGT y USO están seriamente preocupadas por asegurar su participación en las decisiones de tipo económico y social -además de las de exclusiva competencia sindical- que puedan adoptarse. En este sentido, Manuel Zaguirre (USO), Miguel Angel Martínez (UGT) y Julián Ariza (CCOO) explicaron ayer, en una conferencia coloquio sobre la alternativa sindical desarrollada en la Escuela de Organización Industrial, las posiciones de las centrales ante la negociación de estos temas -conjuntamente con los partidos políticos- con el Gobierno.Los sindicatos coinciden en la negativa a establecer un pacto social como condición para la conquista de la libertad sindical que reclaman y que no ven contemplada en el proyecto de ley de Asociación Sindical pendiente de aprobación del Pleno de las Cortes.

En esta línea, el señor Zaguirre afirmó que la reforma sindical -en cuyo contexto se inscribe la citada ley- «no es ni el Intento ni la via para implantar la libertad, puesto que se viene haciendo al margen de sus destinatariosque son los trabajadores».

«La reforma -dijo el señor Zaguirre y asumieron los representantes de CCOO y UGT- es un intento de acomodar a la nueva situación la esencia y corrupción que el verticalisnio ha supuesto. Se trata de reconvertir las estructuras, haciendo de las actuales UTT sindicatos amarillos o anticiases.» A este respecto, denunciaron los intentos de constitu ir sindicatos autodenominados obreros. deniocráticos y apolíticos por parte de algunos verticalistas, «con los fondos económicos de los trabajadores de los que dispone el sindicato oficial a su capricho».

Como alternativa a la actual situación USO concreta la ruptura sindical en la inmediata legaliza ción de las centrales («aun cuando esto ya lo contemple la reforma. como freno a otras posteriores reivindicaciones de los trabajadores»): desmontaje de la CNS para evitar la convivencia de sindicatos democráticos con las viejas estructuras: restitución del patrimonio sindical a los trabajadores y no a las centrales, y creación del nuevo marco legal en el que puedan trabajar las centrales.

Esta alternativa. similar a las presentadas por las otras dos centrales, difiere con la de UGT en el destino del patrimonio sindical pues consideran los ugetistas que han de ser las centrales representativas de los trabajadores quienes administren sus bienes con independencia de la devolución. de aquellos que fueron expoliados a las centrales históricas y partidos políticos.

Coincidieron también las tres centrales en señalar la necesidad de la libertad sindical para acabar con la inestabilidad en la negociación colectiva. redefinir el marco legal en el que habrá de moverse el sindicalismo en un nuevo sistema de producción (las tres centrales propugnan y, persiguen la transformación de la sociedad capitalista en socialista).

Sobre la unidad sindical, aspecto en que también coinciden las tres centrales. existe cierta discrepancia en cuanto al medio para su consecución. Mientras UGT y USO consideran posible alcanzar la en los actuales momentos.

CCOO contempla como imprescindible para lograrla el restablecimiento de la libertad.

Jullán Ariza de CCOO, cerró el turno de intervenciones con la exposición de sus objetivos sindicales de participación de todos los trabajadores, organizados o no, en los consejos de empresa, como expresión de¡ nuevo tipo de sindicalismo que propugnan.