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Triunfa en Francia una canción en favor de la pena de muerte

Una canción macabra, que refleja la creciente simpatía popular en Francia por la pena de muerte, ha alcanzado repentinamente los primeros puestos de las listas de discos.Michel Sardou, uno de los más sofisticados cantantes del país, está ensalzando la guillotina con una balada en la que trata de un padre cuyo hijo fue secuestrado y asesinado. En su canción que lleva por título Je suis pour pide la pena de muerte, pero aclara que prefiere la venganza personal.

Hasta ahora, prevalecía el sentimiento de repulsa contra la guillotina en todos los niveles sociales.

Pero como consecuencia de múltiples casos de secuestros y asesinatos de jóvenes, incluso niños, se ha ido exacerbando el sentimiento en favor de la guillotina como medida defensiva contra los asesinos.

Este sentimiento se ha hecho tan fuerte que los magistrados franceses. en principio opuestos a la pena capital se están viendo obligados a reconsiderar sus puntos de vista. Los últimos sondeos de opinión indican que una mayoría del pueblo francés desea que continúe vigente la guillotina.

Quien ha contribuido a crear esta situación es Patrick Henry, de 23 años, que está a la espera de ser juzgado en Troyes, al este de Francia, acusado de haber secuestrado y dado muerte a un niño de ocho años, Philippe Bertrand.

Los abogados de Henry han presionado para que el juicio no se celebre en Troyes, escenario del crimen, y cuyos habitantes se muestran muy afectados por el monstruoso suceso. No se ha atendido la solicitud de los abogados.

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El caso Bertrand ha hecho surgir una campaña en la que se pretende privar al presidente de la República de la función que el fallecido presidente Pompidou consideraba la más penosa: el poder de decidir, cuando ya han sido desoídas todas las apelaciones, si un asesino ha de ser guillotinado.

Lo mismo que Pompidou, el presidente Valery Giscard d'Estaing se opone personalmente a la pena capital y confía en que un día llegue a abolirse.

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