El Gobierno, dispuesto a seguir con su proceso político

Conocida la noticia del secuestro de Antonio María de Oriol, su hijo mayor, Antonio Oriol, se puso en contacto telefónico con el palacio de La Zarzuela y con el presidente del Gobierno. Este se trasladó inmediatamente a su despacho oficial, en Castellana, 3, donde se reunió a continuación con los vicepresidentes primero y segundo del Gobierno, teniente general Manuel Gutiérrez Mellado y Alfonso Osorio.A esta reunión asistió también, el ministro de la Gobernación, Rodolfo Martín Villa, que regresó precipitadamente de Santiago de Compostela, a las doce y media de la mañana. Había llegado a Galicia dos horas antes, y volvió en el mismo avión.

A las tres y media de la tarde mientras continuaba esta reunión en la Presidencia, el Ministerio de la Gobernación transmitió el siguiente comunicado:

«El Gobierno ha tenido conocimiento en la mañana de hoy (por ayer) del secuestro del presidente del Consejo de Estado, don Antonio María de Oriol y Urquijo, y en estas circunstancias hace constar su sentimiento, condena y repulsa de tan grave hecho.

El Gobierno, que no está dispuesto a que estos actos puedan influir en el proceso político español, porque ese proceso tiende fundamentalmente a fortalecer la voluntad de convivencia y unión de todos los españoles, manifiesta que ha adoptado todas las medidas a su alcance para la persecución de los autores de este atentado, así como Para garantizar la seguridad de todos los ciudadanos. El orden público será mantenido a toda costa, pues sin él no hay libertad ni convivencia y no se tolerará que minorías marginadas intenten hacer fracasar la convivencia pacífica por la fuerza de la intimidación y el terrorismo.

Esta firme y decidida actitud del Gobierno requiere una clara y serena colaboración ciudadana para que estos criminales acontecimientos no puedan ser nunca manipulados por nadie, tratando así de justificar actitudes que carecen de toda justificación.»

Fuentes allegadas a la Dirección General de Seguridad han comunicado a la agencia Logos que «se está elaborando un informe que, posiblemente, se hará público, aunque debido a la entidad del asunto no se puede prever que sea deforma inmediata.

Mientras tanto, las fuerzas del orden establecieron ayer en Madrid, con motivo del secuestro, fuertes medidas de seguridad. Los refuerzos y vigilancia se concentraron especialmente en carreteras, algunos controles en estaciones y aeropuertos, aumento de efectivos y otras similares.

Por otra parte, la noticia causó profunda impresión en la sede del Consejo de Estado. Fue el mismo hijo del secuestrado quién personalmente llamó a la secretaria de su padre, para darle la noticia. Inmediatamente se reunieron los consejeros y letrados que a esa hora se encontraban en la sede del Consejo, y la secretaria telefoneó a los ausentes.