Deben cambiarse las estructuras, pero sin inseguridades

La España favorable al cambio tal y como se está produciendo está compuesta por personas menores de 35 años. Según el resultado del estudio realizado por VSA Consultores, este grupo es partidario de una transformación de las estructuras políticas, pero con un ritmo que no suponga inseguridades.

Al dividir la población española en función de sus actitudes políticas según veíamos en el comentario anterior, ha podido determinarse la importancia cuantitativa de los diferentes grupos de personas ante el cambio. La elección de instrumentos de definición como son las actitudes permite dar a dichos grupos un carácter más intemporal, circunstancia esta no siempre posible, ya que las investigaciones por encuesta vienen a proporcionar algo así como una fotografía de la situación, en un momento dado y bajo circunstancias concretas. En este caso, los días que precedieron al debate sobre la Reforma Política en las Cortes.Hoy vamos a referirnos al grupo más numeroso de los que pueden configurarse a través de las actitudes analizadas, que son, por otra parte, ya conocidas por los lectores de esta serie de comentarios. Se trata de un grupo que equivale a la tercera parte de la población española y al que denominamos: « La España favorable al cambio, tal como se está produciendo.»

Este grupo está fundamentalmente constituido por personas menores de 35 años pertenecientes a amplios sectores de la clase media tanto solteras como casadas y con predominio de los hombres frente a las mujeres. Estas personas presentan características singulares desde el punto de vista político, con abundantes ideas propias y «Simpatías» hacia algunos partidos. Sin embargo por lo general no pertenecen a ninguno de ellos. El conjunto de individuos pertenecientes a este grupo es partidario de una transformación de las estructuras políticas del país. mediante un cambio profundo de sus instituciones pero aceptando un ritmo que no suponga inseguridades. En esta línea están dispuestos a seguir las propuestas del Gobierno no precisamente por su contenido específico sino por su propia fuente. De hecho aceptarían las de cualquier Gobierno evolucionista aunque variase. entonces la dimensión del grupo.

El grupo se manifiesta con criterios moderados respecto a la aceptación de los partidos políticos, lo que supone un rechazo simultáneo de las representaciones extremistas tanto de «derechas» como de «izquierdas». Las opiniones de sus componentes son optimistas en relación con la «preparación electoral de los españoles». a quienes consideran perfectamente capacitados para pronunciarse electoralmente como en otros países. Los componentes de este amplio conjunto muestran, en general, un alto grado de optimismo ante el futuro político en España, en base a las reformas que se intuyen, y dan por supuesta la inclusión de todas las tendencias en las próximas elecciones legislativas. En este sentido, suponen que algunas personas van a sentirse perjudicadas por el cambio, pero, en general, éste será beneficioso para la mayoría.

Sin embargo, hay una nota de escepticismo respecto al próximo referéndum, temiéndose un planteamiento confuso que produzca una elevada tasa de abstencionismo. A pesar de esta inquietud, confían en que el resultado del mismo va a dar mucha más confianza sobre la viabilidad del cambio.

Se muestran más partidarios del cambio y de la Monarquía que la totalidad de las personas consultadas y son más escépticos que dicho total respecto a la situación presente, el Gobierno y el referéndum.

En conclusión, pues, podemos considerar que esta primera España es totalmente partidaria del cambio político y acepta suficientemente bien el ritmo y las características que el Gobierno está imponiendo en el proceso de reforma, aunque el tema del referéndum provoque discrepancias sobre la imparcialidad necesaria en torno a este acontecimiento, respecto al que se supone que las autoridades políticas van a adoptar una postura parcial apoyada en el «control de los medios de comunicación».

La población que constituye este grupo no presenta por lo general. una actitud concretamente las ideologías políticas. Sin embargo no cabe ninguna duda sobre su próxima adscripción a las propuesta si de los diferentes partidos. De hecho desean una rápida identificación con el programa concreto de alguno de ellos y, dada su favorable actitud ante el pluralismo, cabe pensar en que constituyen un grupo potencial accesible para algunas de las tendencias que se ofrecen.

En general se identifican con posturas liberales, socialdemócratas, demócrata-cristianas y conservadoras, aceptando normas de convivencia pluripartidista como en los países democráticos.

Si el concepto de centro no hubiera quedado tan deteriorado podrían constituir un centro ten dente a la derecha dentro de un espectro político «standard», que no es el nuestro.