París: Tarradellas no opina y Carrillo lo considera "un paso atrás"
La reunión, en Madrid, el sábado último, de la mayoría de los partidos y grupos de la oposición española al régimen, tuvo, en Francia, un eco muy amplio. Todos los medios informativos se interesaron y, generalmente, se consideró justo el calificativo de reunión histórica, empleado por el señor Ruiz-Giménez, cuya estatura política fue confirmada, según algunos editorialistas, como el del vespertino Le Monde. Para este diario, sin embargo, en conjunto, el concilio anti-régimen, de Madrid, fue una semivictoria, mientras que para el conservador Le Figaro se saldó por un semifracaso.
La opinión francesa, a juzgar por sus comentarios, analizó la reunión de Madrid olvidando un hecho que muy pocos observadores han tenido en cuenta: que España vive, aún, bajo las estructuras fundamentales de la dictadura. Desde que se murió el general Franco, los franceses manifiestan una tendencia clara, involuntaria, sin duda, hacia la amalgama que consiste en analizar los problemas españoles con los mismos esquemas mentales que lo hacen cuando se trata de confrontar la lucha, régimen-oposición francesa, en donde la una y la otra son emanación del sufragio popular.
Entrevistas de Tarradellas
Por su lado, el señor Tarradellas, presidente de la Generalidad de Cataluña, a propósito de la reunión convocada por Coordinación Democrática, ayer, lunes, le declaró a EL PAIS: «No opino sobre las instancias unitarias establecidas en Madrid, porque creo no me corresponde. Ahora bien, teniendo en cuenta el problema de conjunto, del pueblo español, voy a recibir, a partir de la semana entrante, a dirigentes de los diversos partidos políticos, en tanto que tales».Sobre la posibilidad de entrevistarse con dirigentes del PCE y del PSUC, Tarradellas afirmó: «No tengo inconveniente alguno en recibir a los dirigentes de todos los partidos, incluido Carrillo. Las puertas de mi casa han estado siempre abiertas y, por otra parte, siempre he mantenido relaciones cordiales con el PCE y con el PSUC.
Respecto a la ausencia del Consell catalán, en Madrid, el presidente de la Generalidad se limitó a recordar: «En París el pasado día 29, no se abordó este problema». Sobre este particular y, en general, sobre la problemática entre las fuerzas de oposición, catalanas y del resto de España, un grupo de exiliados políticos catalanes, socialistas, demócratas y comunistas declaró a EL PAIS: «La actitud de Tarradellas, como lo prueban los últimos acontecimientos, en las reuniones de París y Barcelona, dos días después, obedece a un elemento determinante en él: su anticomunismo casi visceral, incomprensible en un demócrata que ha empleado los mejores años de su vida en la lucha contra la dictadura».
Carrillo, negativo
Por fin, Santiago Carrillo, secretario general del PCE, ayer, en Radio Francia, la emisora del monopolio estatal, fue ampliamente interviuvado sobre la situación española. A propósito de la reunión de Madrid, cuando el periodista se la presentó como un paso hacia adelante del Gobierno, cara a la democracia, Carrillo respondió: Es un paso hacia atrás, respecto a su política. Dijo, también, que cuando volviera a España. trabajaría en el sentido de las resoluciones de CD, para el logro de la democracia en España.El líder comunista reveló que, durante los siete meses que acaba de pasar en España, clandestinamente, tuvo contactos con emisarios oficiosos del Gobierno. Y, como ya declaró a EL PAIS, el último mes de agosto, recordó que está dispuesto a entrevistarse con el Rey y con Suárez para exponer la situación española.
Según los puntos de vista de su partido, a su juicio, Juan Carlos, hasta la fecha, no está dando la impresión de desear democratizar el país, ya que habría que empezar por elegir un Parlamento constituyente.
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