Encontrar al "Rubio" y el cadáver del señor Fuentes

Eufemiano Fuentes está muerto desde el pasado día 2 de junio, fecha en que fue secuestrado en su residencia de Las Meleguinas, término municipal de Santa Brígida, en Gran Canaria.

Su cadáver se encuentra en un pozo de 70 metros de profundidad entre las localidades de San Lorenzo y Tarnaraceite, a 12 kilómetros de la vivienda del industrial tabaquero.En el mismo lugar fue arrojada la máquina de escribir en la que se hizo el escrito de supuesta identificación dejado en la casa del señor Fuentes Díaz por su raptor.

Al parecer, fue el padre de el Rubio, Juan Cabrera García, de setenta y un años. de edad, que estaba detenido desde hace días, quien, al final, reveló a los inspectores de la Brigada de Investigación Criminal las circunstancias reseñadas.

Cinco personas de la familia del supuesto asesino, Angel Cabrera Rodríguez, alias el Rubio, están detenidas en estos momentos, además de su padre y cuatro hermanos, dos de ellas mujeres y un ex legionario, cuyo nombre no ha sido revelado.

Angel Cabrera, o también conocido por Angelito, de treinta años de edad, con amplios antecedentes delicitivos, tomó parte en un atraco a una sucursal de la Caja Insular de Ahorros y a una planta embotelladora de agua en el término dé Firgas. Especialista en camuflajes, asistió, vertido de mujer, al entierro de su madre cuando era intensamente buscado por la policía por delitos anteriores. Perteneció a la banda del Patamocha o Nene, actualmente en prisión con dos miembros cualificados de la misma organización, también conocida por los Internacionales, y que son el Rafael y el Sigfrido, que cumplen condena por delitos anteriores.

El control policial en Arucas, lugar de residencia de la familia de el Rubio, se ha acentuado en las últimas horas, así como la vigilancia en el puerto y aeropuerto, porque suena insistentemente la opinión de que Angel Cabrera pudo salir de 'la isla, punto éste que tampoco ha sido desmentido por la policía. Se insiste en una llamada telefónica que el Rubio efectuó al puesto policial del Puerto, en la que amenazaba con represalias a los agentes del orden e incluso con «volar la comisaría» si les ocurría algo a sus familiares detenidos. En esta situación se ha reforzado la vigilancia del sector y se han cerrado al tráfico las calles de acceso al mismo.

La nebulosa que envolvía el extraño suceso del rey del tabaco comenzó a disiparse en la madrugada del pasado día 7 de agosto, cuando los policías que seguían al yerno de don Eufemiano, en el momento de proceder al frustrado pago del rescate, escucharon, en medio del tiroteo, una voz apremiante que decía: ¡Escapa, Rubio!.

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