Los partidos de oposición niegan el pacto

Los partidos y fuerzas políticas más importantes de la oposición democrática han desmentido que haya habido reuniones oficiales al margen de Coordinación Democrática para establecer negociaciones con el Gobierno. Pese a la insistencia de alguna agencia informativa, al afirmar que «se está gestando el pacto entre los sectores fuertes de la oposición para presentar al Gobierno Suárez una alternativa homogénea en base a un cambio real», estos sectores han señalado que es inviable cualquier pacto que no implique la apertura de un proceso constituyente.Así, la comisión ejecutiva del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) ha facilitado a EL PAIS un mentís en el que la misma niega «que haya habido conversaciones formales al margen de Coordinación Democrática».

También la Federación Popular Democrática que preside José María Gil-Robles y que no está integrada en CD, niega en el comunicado facilitado,a este periódico que «miembros de su ejecutiva hayan asistido a reuniones políticas con representantes de otros partidos con el fin de negociar con el Gobierno».

Por su parte, el Partido Comunista de España (PCE) ha facilitado otro comunicado en el que reitera su posición:

«Se propugna que la oposición unida debe estar dispuesta al diálogo con el Gobierno a los fines de una transformación democrática sobre la base de las siguientes condiciones:

Amnistía general sin exclusiones; funcionamiento libre de todos los partidos políticos; constitución de un Gobierno provisional, de reconciliación nacional; apertura de un período constituyente mediante convocatoria de elecciones a una Asamblea que elabore la Constitución del país; formación de los Gobiernos autónomos de Cataluña, Euzkadi y Galicia y elaboración de estatutos de autonomía para los pueblos y regiones que lo reclamen; reforzamiento de Coordinación Democrática y de sus lazos con otras instancias unitarias de nacionalidades y regiones.»

Del mismo modo, el Partido Socialista Popular (PSP) niega en su comunicado «que haya habido conversaciones oficiales al margen de CD para establecer negociaciones con el Gobierno. El PSP no está en condiciones de afirmar o negar que haya podido haber intercambio de opinión entre unos u otros partidos».

Finalmente, el Partido Démócrata que preside Joaquín Garrigues Walker (no integrado en Coordinación) ha manifestado que «no ha participado en ningún tipo de conversaciones a este respecto, ni ha tomado iniciativa alguna para celebrar negociaciones con el Gobierno. En tomo a las condiciones que pondría el PD para negociar con el Gobierno, la respuesta es: «Entendemos que lo dificil en este momento es establecer la identidad del interlocutor válido para una negociación de este tipo. Pensamos que el problema con el que se enfrenta el país no es de Gobierno, sino, en definitiva, de crisis de Estado, por lo que para: establecer condiciones de negociación habría que considerar no sólo las fuerzas políticas y sindicales, sino también las instituciones del actual Estado para llevarlas a cabo».

Mientras tanto, el Gobierno parece perder interés por sus conversaciones con los partidos y concentra su esfuerzo en la implantación de los dos proyectos legales de mayor alcance: la normativa electoral y el proyecto de reforma constitucional.

Este último podría tomar definitivamente la estructura de una ley de Bases, al parecer ya totalmente elaborada. Se conserva del proyecto Arias el sistema de un Parlamento bicameral.

Por lo que respecta al proyecto de ley electoral, cuyo texto está muy avanzado, podría basarse en un sistema proporcional, mayoritario y de ballotage, similar al francés. Con excepción de algunos detalles, el proyecto se mantiene en la misma línea del que mantenía en estudio el Gobierno Arias.