El alcalde suspendió la prórroga de concesión a Pavillón

La alcaldía-presidencia del Ayuntamiento de Madrid, que ocupa Juan de Arespacochaga, decidió suspender el acuerdo tomado por el Pleno ordinario, que se celebró el pasado día 30, en relación con Pavillón, o, según el nombre tradicional, la Casa de Vacas, instalada en el Retiro -ver EL PAIS de los días 1 y 3-.El alcalde se ha basado para ello en la prerrogativa que le concede la ley, según la cual un acuerdo tomado por el Pleno puede ser suspendido en el plazo de 48 horas. Esta es la primera vez que una decisión de este tipo es adoptada por un alcalde en la capital de España.

Según el acuerdo del Pleno del Ayuntamiento la concesión que ahora abarca hasta el año 1981 -llegaría hasta 1989, con lo que, en opinión del concejal Eduardo González Velayos, lesionaba grandemente los intereses del Ayuntamiento y, en consecuencia, del pueblo de Madrid.

«Yo voté a favor, explicó el alcalde en la rueda de prensa, pero me quedaban dudas, además de que, en el expediente, faltaba el informe jurídico. Cuando lo pedí, se veía que no estaba clara su legalidad. Por eso decidí hacer uso de esta prerrogativa».

El asunto ha pasado ahora a manos de la Audiencia Territorial, que ha de decidir si realmente el acuerdo adoptado por el Pleno del Ayuntamiento es legal o no.

La oposición dentro del Pleno no fue excesivamente fuerte, aunque las razones que aludió el señor González Velayos, fueron en virtud de que Madrid necesitaba una gran sala de fiestas y no la que actualmente tiene en el Retiro. Por otra parte, el señor González Velayos, su máximo defensor declaró a EL PAIS que tal aprobación era ilegal, ya que la prórroga se había concedido de una forma encubierta, como si únicamente se tratara de unas obras de reforma del local, a cambio de una compensación económica -que en este caso consistía en la prórroga de la concesión-.

Asimismo, y en evitación de posibles futuras malas interpretaciones de la ley, el alcalde ha dictado un decreto por el que el Cuerpo Jurídico del Ayuntamiento habrá de redactar un Informe en todos aquellos casos en los que se pueda entrar en duda con respecto a su interpretación legal.

«No creo, insistió el alcalde, que haya existido mala voluntad por parte de nadie, Tal vez se trata únicamente de las prisas por aprobar el asunto, las que condujeron a este incidente».