Incidencia negativa de la sequía en nuestro comercio exterior

«La reducción en la importación agraria, observada en el primer semestre, es difícil que se mantenga al haberse modificado las condiciones favorables en que se ha movido la agricultura española. La sequía generalizada hará subir las cotizaciones de los productos agrícolas y ganaderos, a la vez que aumentarán nuestras necesidades de importación», según pone de relieve el boletín semanal y órgano del Ministerio de Comercio, Información Comercial Española (ICE).En este sentido resalta que la disminución en las cosechas de cereales y forraje obligará a realizar importantes compras de maíz, soja y piensos.

En el informe elaborado por la Secretaría General Técnica del Ministerio de Comercio se pone de relieve que es previsible, asimismo, un aumento en el sacrificio de reses vacunas, lo que, unido a la reconstitución de los stocks de porcino, llevaría a unas menores necesidades de importar carne. «Sin embargo -dice- la reducción de la cabaña de vacuno repercutirá negativamente en un futuro no muy lejano».

Más adelante la publicación señala que la sequía, igualmente, seguirá afectando a las importaciones de energía. «Dada su insustituibilidad a corto plazo, se hace cada día más patente la necesidad de arbitrar medidas de conservación de la energía si se desea que no continúe aumentando este epígrafe».

Por lo que se refiere a los precios de las materias primas y productos intermedios seguirán su senda alcista, afectando a los sectores que no han reconstituido a tiempo sus stocks. Por tanto, aun no siendo previsibles fuertes aumentos de volumen, sí lo son de valor, especialmente en el sector de los minerales.

Sobre las importaciones de bienes de equipo, estrechamente ligadas a las perspectivas económicas interiores, ICÉ señala que no parece que puedan aumentar sensiblemente. a corto plazo. «A medida que se consolide la recuperación económica en nuestros principales mercados, es lógico esperar un sensible aumento de las exportaciones, cuyo margen de competitividad parece mantenerse».

El comportamiento de las exportaciones españolas en el primer semestre traduce claramente -según apunta ICE- la apreciación generalizada de que la recuperación mundial se debe al tirón de la demanda de consumo privado, manteniéndose todavía retraída la demanda de inversión. En la medida en que la economía mundial recupere los altos niveles de inversión pasados es de esperar un comportamiento más favorable de las exportaciones de bienes de equipo.

«En conjunto -termina el informe de ICE- el déficit comercial, en una perspectiva a plazo medio, no presenta síntomas claros de mejora, y la suerte de nuestro saldo exterior va a estar determinada por la evolución de la coyuntura interna.