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Nadie pidió ayer amnistía ante la cárcel de Barcelona

Por vez primera, desde la pasada Navidad, ayer no permaneció nadie ante la cárcel Modelo de Barcelona en petición de amnistía. Esta actitud fue iniciada el pasado 25 de diciembre por el religioso Luis María Xirinac, quien se encuentra detenido, desde el 20 de julio, en la propia cárcel Modelo por impago de una multa de 1.000 pesetas que le impusiera el capitán general de Cataluña. La razón de la sanción era «ligera irrespetuosidad de la autoridad de un juez militar».La sanción fue dictada después de que el padre Xirinac se negase a declarar en castellano, por desear hacerlo en lengua catalana.

Desde el ingreso de Xirinac en la cárcel, otros compañeros suyos le relevaron en su permanencia de doce horas diarias ante el establecimiento penitenciario. Ayer, sin embargo, se pudo comprobar que en el lugar donde estos últimos estaban situados habitualmente se encontraban varios números de la policía armada.

En medios jurídicos barceloneses se ignora si el padre Xirinac considerará que con la amnistía promulgada debe dar por terminada su acción o bien proseguirá en su actitud por encontrarla insuficiente.

Por otra parte, cuarenta políticos e intelectuales catalanes han facilitado una nota a los medios informativos sobre la detención del padre Xirinac, y su negativa a declarar en castellano. «Es preciso -dicen los firmantes del escrito- que la legislación sea modificada, de manera que no sean vulnerados los derechos del pueblo catalán.»

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