No hay posibilidad de unión entre el Partido del Trabajo y el Partido Comunista

La capital del archipiélago está viviendo esta semana los días más politizados de toda su historia en estos últimos 40 años. Del domingo acá se han celebrado ya dos manifestaciones autorizadas, la del Puig de Sant Pere y la de Galerías Preciados, y una tercera, la manifestación pro amnistía convocada por las fuerzas de la oposición, fue desautorizada a última hora ante el anuncio del temor de una contramanifestación convocada por la ultraderecha y que podría haber convertido el acto en un nuevo Montejurra, según propias palabras del gobernador civil, duque de Maura.

Los actos políticos de esta semana continúan y ayer tarde en la "sala augusta" de esta ciudad, ante un numeroso auditorio que no llegó a completar el local, el líder del Partido del Trabajo de España (PTE), Nazario Aguado, pronunció la conferencia anunciada sobre el tema "Democracia y cambio político".Horas antes de su intervención ante el público, el líder laboralista castellano sostuvo una rueda de prensa donde apuntó las principales líneas de su posterior charla. En el transcurso de la misma dijo que "pretendemos conformar un frente de fuerzas políticas populares que facilite el paso a la democracia por una vía pacífica, intentando la movilización de fuerzas sociales obreras para conseguir este objetivo. En la medida que no existe aún un movimiento capaz de derrocar este régimen, nosotros aceptaríamos un compromiso con el Poder establecido, porque no son cosas negociables el que el Gobierno sea provisional, que se consigan las libertades democráticas, que se llegue a tener estatutos de autonomía en las diferentes regiones, que se conceda una amnistía general y la celebración de unas elecciones generales a corto plazo".

Nazareo Aguado es partidario de legalizar todos los partidos e incluso el de Fuerza Nueva de Blas Piñas, siempre, claro está, que éste no ataque las libertades democráticas. De igual manera mantuvo el líder obrero que se acepte el Partido Comunista, porque siempre éste se ha apoyado en la opinión mayoritaria de la población. «Los comités centrales del PTE y del Partido Comunista mantienen contactos -dijo- aunque no hay ninguna posibilidad de que ambos, más tarde o más temprano, se lleguen a unir, ya que existe un abismo entre los dos.»