USA manipula la evolución del franco y la caída del oro

La estabilización precaria del franco francés, la revalorización del dólar, y la caída del oro, los tres fenómenos que vivieron los mercados occidentales durante los últimos diez días, ¿están perfectamente orquestados por los Estados Unidos, para que su divisa siga confirmándose como única moneda de cambio internacional? A esta pregunta, en los medios bursátiles de París, se responde afirmativamente.El tambaleo de las divisas de países cuyas economías no se manifiestan seguras, como las ventas de oro, en efecto, no pueden más que favorecer al dólar americano. Los Estados Unidos son quienes organizan, regularmente, la venta del metal amarillo del Fondo Monetario Internacional (FMI), que, cada tres semanas, a lo largo de cuatro años, va a regalar su stock aurífero.

La primera venta tuvo lugar a primeros del pasado mes de junio y, el oro, se cotizó a 126 dólares la onza. La segunda operación, la semana última, forzó la baja hasta 122 dólares la onza y, la tercera, anunciada para septiembre, a juicio de los especuladores, aún reducirá más su curso. De aquí, precisamente, las ventas importantes, de tres días a esta parte, en Londres, Zurich, Francfort y París.

Existen otros enemigos del oro. La Unión Soviética, también este año, tendrá que comprar cereales a los Estados Unidos y a Canadá y, para ello, venderá oro en Londres y en Zurich. El consumo, en la industria y en la joyería, disminuye o no aumenta, al menos. Y no hay que olvidar la situación, incierta, en Africa del Sur, que es el primer exportador mundial. Los especuladores temen un viraje político que incida sobre el valor del oro.

Todo lo expuesto, para los expertos en estas cuestiones, explicaría el desencanto de la especulación frente a lo que ha sido el cobijo fabuloso, y seguro, de todas las fortunas de la tierra. Por el contrario, todos los indicios hacen prever la consolidación del dólar, a medio plazo por lo menos: económicamente, su reactivación parece cierta. En el plano monetario, su voluntad es ley. Y, en el político, el sometimiento de Europa Occidental, a las órdenes de Washington, da pruebas cada vez que la ocasión se presenta. De aquí el éxito actual del dólar, dicen los especialistas.