Primer mitin comunista autorizado en Barcelona

Anoche tuvo efecto en un cine del barrio de Horta el primer mitin legal de carácter estrictamente comunista que se celebra en Barcelona desde 1939. Estaba organizado por la federación norte de la Ciudad Condal del Partit Socialista Unificat de Catalunya (PSUC), con motivo del XL aniversario de la creación de este partido y contó con la presencia de unas 1.500 personas.El título genérico de la reunión era «Un futuro para todos» matizado con el subtítulo «Por una opción socialista». El acto estaba presidido por una gran bandera roja con el lema «Socialismo en Llibertadt». Figuraba también en la mesa presidencial una bandera catalana, flanqueada por una vasca y otra roja del PSUC.

Intervinieron diversos oradores que glosaron los temas «Unidad sindical», « Por una ciudad democrática», «Los cristianos y el socialismo» y «Socialismo con libertad».

Los asistentes iban desde una mayoría obrera hasta importantes y activos grupos de jóvenes con banderas rojas representativas de organizaciones sectoriales de la «Juventud comunista de Cataluña», adscrita al PSUC.

Los gritos proferidos por los participantes denotaban un alto grado de militancia: «Si, si Dolores a Madrid», «Se siente, se siente, Gregorio está presente» (alusivo a Gregorio López-Raimundo, secretario general del PSUC que reside en Barcelona, en la clandestinidad)

Jordi Moretones, dirigente de una asociación de vecinos y miembro del PSUC provocó grandes aplausos al describir la organización urbana que su partido preconiza. En diversas ocasiones fue interrumpido por los gritos de «Viola dimisión».

Marta Corcoy, comentó el papel de la mujer dentro de su partido, en términos de feminismo radical. Afirmó que el PSUC «no había asumido un papel correcto en la lucha por la liberación de la mujer». Terminó afirmando que era necesario combatir por la consecución de «las libertades hoy, el socialismo mañana y el feminismo siempre».

Intervino, en tanto que cristiano y comunista militante Jordi López quien afirmó que su partido «no busca a los cristianos como «compañeros de viaje, sino como camaradas». Dijo que para su partido «el ateismo es un hecho de otras épocas: es una herencia a la que renunciamos». Agregó que muchos cristianos «militamos en el PSUC con nuestra fe porque nuestra fe es revolucionaria».

Más adelante, el mismo ponente afirmó que «la religión había sido el opio del pueblo, ello es un hecho que los cristianos asumimos y que en base a él pedimos perdón a la clase obrera».