La posición de Ford es apurada, pese al apoyo de Goldwater

A punto de iniciase la tregua que supondrá en la campaña electoral la celebración del 200 aniversario de la Declaración de la Independencia este fin de semana, el presidente Ford vio reforzada su postura en la lucha por la nominación republicana al recibir el apoyo del senador Goldwater, conocido por su ideología ultraconservadora. Mientras tanto, el virtual candidato demócrata, Jimmy Carter, inició consultas entre los dirigentes de su partido para nombrar candidato a la vicepresidencia.Goldwater, que fue candidato republicano en las elecciones de 1964, anunció su decisión el miércoles y la definió como la «más difícil que he tenido que tomar en mi vida». El senador de Arizona justificó su apoyo a Ford alegando que, por primera vez en la historia americana no creía que el Gobierno pudiera permitirse los meses de reorganización necesarios tras un cambio en la Casa Blanca.

La decisión de Goldwater -que en su campaña de 1964 fue apoyado por Reagan- puede suponer que un determinado número de delegados oficialmente «no comprometidos» den su voto a Ford. Sin embargo, la situación continúa siendo apurada para el presidente, quien, según el recuento de delegados hecho ayer, por el diario The New York Times, cuenta con 1.052 delegados de los 1.130 necesarios para ser investido candidato. Reagan, según el mismo periódico, tendría en la actualidad 1.018 compromisarios, con lo que estaría a sólo 34 votos de distancia del presidente.

Tras las convenciones locales que deben celebrarse este mes en varios Estados (Colorado, Connecticut, Dakota del Norte y Utah), los pronósticos del Times indican que Ford quedaría 44 votos por debajo de los 1.130 requeridos, mientras que Reagan casi le alcanzaría, quedando a 48 votos de distancia. Asistirán a la Convención Republicana de Kansas City los encargados de decidir la victoria de uno u otro candidato.

Mientras tanto, el virtual candidato demócrata, Jimmy Carter, inició consultas para elegir compañero en la carrera a la Presidencia. Altos miembros del «staff» de Carter mantuvieron conversaciones durante toda esta semana con diversos senadores y congresistas. El propio Carter se entrevistó con George Meany, presidente de la poderosa central sindical AFL-CIO, para pedirle su apoyo y consultarle sobre el candidato a la vicepresidencia.

En su desayuno de trabajo celebrado ayer, en el club de prensa extranjera de Washington, el «mánager» de la campaña electoral de Carter, Peter Bourne, afirmó que en la actualidad se barajaban seis nombres de los que saldría el candidato a la vicepresidencia, estos seis posibles candidatos son los siguientes: Frank Church, Walter F. Mondale, John H. Gienn, Adlai E. Stevenson, Henry M. Jackson y Edmund S. Muskie. Todos son senadores relativamente jóvenes y con brillantes carreras políticas.Muskie, senador por Maine, fue canididato a la vicepresidencia en 1968, junto a Hubert Humphrey. El senador expresó su sorpresa por verse incluido en la lista de posibles vicepresidentes aunque añadió que si Carter le hace una propuesta seria, la estudiará seriamente. Church, Glenn y Stevenson son, sin embargo, quienes parecen contar con mayores posibilidades de ser elegidos candidatos a la vicepresidencia. Church, senador por Idaho, tiene una larga experiencia parlamentaria, especialmente en el Comité de Relaciones Exteriores. Glenn, elegido senador por Ohio en 1974, desarrolló una brillante carrera en sus dos años de actividad en el Capitolio. Por último, Adlay Stevenson III, senador por Illinois desde 1970, pertenece a una familia de gran prestigio en la vida política americana. Su padre fue embajador en la ONU y candidato a la presidencia por su partido.

Entre estos tres nombres, se asegura en Washington, está el próximo vicepresidente de los EEUU, porque cada vez se pone menos en duda la posibilidad de que Carter gane las elecciones.