Torres: "Cruyff politizó al Barcelona"
La idea de que Cruyff politizó al Barcelona es el eje de una entrevista con Antonio Torres, jugador del Barcelona, que Mundo Diario publica en su número de ayer. El que durante varias temporadas fuera capitán del equipo azulgrana hace consideraciones acerca del pensamiento político del club al que pertenece, y de las actitudes políticas de algunos de sus compañeros; especula con la influencia del Barcelona sobre la región; critica el esquema en que se mueve el deporte español y argumenta sobre las posibilidades de cambio en las estructuras y jerarquías de la política deportiva nacional.Carlos Rexach y Antonio Torres firmaron un manifiesto en el que se hacía una llamada popular por la unidad de todos los socialistas catalanes en tomo al Partit Socialista de Catalunya, que se pretendía crear. Torres explicó que fue Rexach quien le «unió al manifiesto». El jugador del Barcelona, que a partir del día 30 del presente mes se incorporará al cuadro técnico del equipo, se declara simpatizante de la Esquerra Republicana de Catalunya para, a continuación, hacer algunas consideraciones sobre las ideas políticas de sus compañeros y del Barcelona.
En cuanto a la plantilla del club, Torres la define de «centroderecha. Hay algunas excepciones; pero mínimas». Al referirse al resto de sus colegas de Primera División dice que «socialistas de boquilla puede haber muchos; pero en la práctica, pocos». La tónica, sin embargo, del conjunto de jugadores de esta categoría, al contrario, es la de la no definición política. «En general, el futbolista profesional no se define y su única preocupación se centra en los aspectos personales». Después de exponer que el «mundo del fútbol está falto de concienciación», habla de la trascendencia que tuvo para todos los componentes de la plantilla del Barcelona la incorporación de Johan Cruyff. «Nos ayudó un poco a los que teníamos interés. Cuando vino sabía de España mucho más que nosotros y conocimos un tanto nuestra situación real».
En cuanto a las opciones políticas del Barcelona, Torres, efectivamente, lo considera algo más que un club, pero «en Catalunya, fuera de nuestra tierra, no representa más que a Catalunya, y no tiene muchos adeptos». Se lamenta de que el Barcelona haya sido «utilizado por la burguesía catalana como plataforma para sus intereses», pero, a pesar de todo, él cree más «en el Barcelona que representa a los 70.000 socios de todas las clases, principalmente media y obrera».
Hace comparaciones sobre: las actitudes de los diferentes equipos y afirma que si el Athlétic y la Real están dentro de una «orientación más de izquierda» política, el Español es el equipo gubernamental de Catalunya y el Barcelona «la gran oposición, el equipo fuerte de la periferia en relación a Madrid».
En cuanto a las coordenadas en que se mueve el deportista español -el profesional del fútbol, de manera especial- considera ilógico que un profesional gane más en concepto de dádivas y primas que de sueldo ». No obstante, considera que los ingresos que tienen los futbolistas pueden, hasta cierto punto, defenderse dado que «la vida de un futbolista es breve y debe ganar un capital que luego le permita establecerse». Sin embargo, se da perfecta cuenta de que estas cifras están en función de una contraprestación política. Porque «yo aseguraría que, en mayor o menor grado, todos estamos siendo utilizados. El fútbol es una baza política importante ».
Luego de poner en tela de juicio los reglamentos sobre los contratos de los futbolistas, que les impiden una libertad profesional basada en el derecho de retención de que gozan los clubs, se pregunta por qué «nosotros -los futbolistas profesionales- debemos rendir cuentas a Hacienda y un profesional del baloncesto que gana igual o más, no». En definitiva, para él no existe el olimpismo, sino que es algo «que no existe porque todos lo tergiversan según sus intereses».
La entrevista con Antonio Torres finaliza en unas consideraciones sobre las jerarquías deportivas del país. Entiende, en este punto, que el deporte "debería tener al frente no a un político" sino a alguien que lo conozca «profundamente».
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.