Comienza el éxodo blanco en Rodesia

Tropas del Ejército y Policía de Seguridad rodesianas prosiguen sus acciones contra elementos guerrilleros. Los comunicados oficiales de Salisbury informan que en las últimas veinticuatro horas han muerto veintiún guerrilleros nacionalistas. Si bien no se da cuenta de las bajas concretas de las tropas rodesianas progubernamentales en las últimas acciones sí se informó de las pérdidas desde 1972, el comienzo de la guerra. Fueron 135 militares.

Entre los 270.000 blancos de Rodesia crece la inquietud sobre el aumento de las acciones guerrilleras y la repercusión de tales acciones en la economía del pueblo.Por otra parte, según las estadísticas oficiales, han abandonado Rodesia, en el pasado mes de abril, mayor número de blancos que en los últimos doce años. En abril dejaron el país 1.470 blancos, al mismo tiempo emigraron a Rodesia sólo 653 personas de raza blanca, lo que significa un retroceso de la población blanca de 817 personas.Si esta tendencia se mantiene significaría una pérdida de 10.000 personas por año entre la población blanca. El Gobierno no oculta su preocupación sobre este abandono del país por parte de los blancos.

El aumento del número de emigrantes corresponde a una intensificación de las actividades guerrilleras. Durante los primeros veinticinco días de mayo cayeron 168 personas víctimas de la guerrilla, y en los cinco primeros meses del presente año han perecido 336, la mitad de ellas en el mes de mayo.

El total de víctimas en el presente año suma más que las habidas en los años pasados desde 1972. Precisamente, cuando esta guerra comenzó en la Navidad de aquel año en la región noreste de Rodesia.

En tres años y medio cayeron 1.335 personas, 816 guerrilleros, 334 negros y 23 blancos, así como 112 personas miembros de las Fuerzas Armadas.

Paralelamente al aumento de las víctimas de la guerrilla, se han extendido por todo el territorio las actividades de los grupos rebeldes, hasta febrero de este año la actividad guerrillera estaba limitada al territorio noreste de Rodesia (operación Hurricane).

Desde entonces, el frente se ha extendido desde Mozambique al sudeste, y al sur del país (operación Repulse). En las últimas semanas hubo incidentes cerca de la frontera con Botswana, y, en el sudeste, extendiéndose el territorio de operaciones guerrilleras a lo largo de 1.500 kilómetros.

Para vigilar este extenso y vasto territorio son muy escasas las Fuerzas Armadas en Rodesia. Los reservistas, que habían terminado su servicio militar en los últimos tres años han sido llamados nuevamente a filas, y la duración del servicio militar ha sido prolongada de doce a dieciocho meses.

Las Fuerzas Armadas concentran su vigilancia sobre las vías comerciales y turísticas del país, pues en las últimas semanas se produjeron seis tentativas guerrilleras para volar las únicas vías férreas que permanecen para el comercio exterior, una sobre Bitbridge y otra sobre Botswana hacia Africa del Sur.

La mayoría de los blancos creen que es imposible una victoria militar del Gobierno. El partido de la oposición de los blancos, Rodesia Party, ha propuesto negociar con los negros nacionalistas para llegar después de un periodo de transición a la formación de un Gobierno de mayoría negra.

El Rodesia Party solicita la rápida derogación de las leyes racistas y discriminatorias, propuesta que también ha sido apoyada por una organización juvenil blanca.

El primer ministro lam Smith se encuentra sometido a diversas y encontradas presiones. Sudáfrica exige una rápida reanudación de las negociaciones.