No todos están de acuerdo con la medida

La medida no ha sido recibida con buenos ojos, por parte de la totalidad de los comerciantes ni de los vecinos. Tanto contentos como disidentes fueron encuestados. Los resultados son los siguientes:«En vez de abrirlas se tenían que cerrar todas las calles del centro.» «Se van a volver a armar tapones en la calle de la Cruz.» «A pesar de todo lo que se haga, el problema de la circulación en la zona no hay quien lo arregle.» Los taxistas, máximos beneficiados, no ven la eficacia de la decisión municipal. Aunque añaden «al menos podremos dejar a los usuarios a la puerta de su casa».

El encargado de la cafetería Dorin opina que «al principio puede ser beneficioso; después todo será igual. A nosotros incluso nos perjudica. Se va a perder la tranquilidad que existía ».

En Optica San Gabino no agrada la idea. «A la larga, va a perjudicar al comercio. La gente se para a mirar los escaparates y entra.» Los locales de ventas de entradas para las corridas de toros de la calle Victoria dicen que «el transporte público nos beneficia, pues muchos de los clientes se quejaban de no poder venir en taxi a por las entradas».

La Optica Príncipe comparte esta opinión. «Se estaba vendiendo menos.»

«Desde que no hay coches hay menos trabajo en la portería. Los niños molestan, pero los coches ensucian», nos decía una portera de la, misma calle. También el guardia urbano del cruce Espoz y Mina con Cruz dice: .

«El verdadero problema que va a crear esta medida dependerá de la educación ciudadana. Ahora nos preocupamos de que nadie se detenga e interrumpa la circulación."