Antony, contra el declive del Betis

El ambiente vivido en el Benito Villamarín el pasado sábado recordó a otras épocas en el Betis. El 1-3 del Alavés sentó como un tiro a la afición andaluza, que respondió con duros cánticos contra el consejo de administración, presidido por Ángel Haro y José Miguel López Catalán, y los futbolistas. Después de un siete de 27 puntos en la Liga y eliminado de la Copa del Rey tras una contundente goleada del Barcelona (5-1), el Betis está en crisis. Y ante las crisis, el consejo ha reaccionado con el fichaje de Antony, delantero internacional por Brasil del Manchester United, que llega en calidad de cedido hasta final de temporada y sin opción de compra. El atacante tiene previsto pasar las pruebas médicas este sábado en Sevilla y firmar su contrato. El Betis juega en Mallorca (14.00 horas; Movistar LaLiga). El jueves, Antony estuvo en el banquillo durante el duelo de Liga Europa del United ante el Rangers (2-1). Rúben Amorim, el técnico del conjunto inglés, decidió dar luz verde a la salida del jugador después de que los rectores del United le aseguraran la llegada de un sustituto. Se trata de una histórica entidad que vive un mal momento, fuera de la Champions y 13º en la Premier.

El Betis apuesta por un futbolista de alto nivel, aunque venido a menos en las dos últimas temporadas. A sus 24 años, Antony prueba en el fútbol español después de una explosión en el Ajax que provocó que el United lo fichara por 95 millones de euros en el verano de 2022. El club andaluz ha peleado con el Villarreal el fichaje del delantero y pagará cerca de dos millones por estos cinco meses. Si el club andaluz se mete en Europa o gana la Conference League, deberá abonar una serie de pluses al United. Del mismo modo, el conjunto inglés ha colocado una cláusula por la que Antony debe jugar un número de partidos con el Betis. De no hacerlo, el club inglés debe ser indemnizado. “Es un futbolista de alto nivel que podemos traer como una oportunidad de mercado”, aclaran desde el Betis a este diario. Un futbolista que debe dotar de velocidad, desborde y gol a un equipo asolado por las lesiones y sin demasiadas variantes en ataque.

Antony se crio en la Favela do Inferninho, conocida por el narcotráfico y en los suburbios de São Paulo. Debutó en el São Paulo en 2019 y solo un año después fue fichado por el Ajax. En los Países Bajos, país de tradicional acogida de los futbolistas brasileños antes de jugar en las grandes Ligas, realizó dos grandes temporadas, jugando 82 partidos y haciendo 24 goles. El Manchester United lo fichó en 2022 a cambio de 95 millones de euros, la segunda operación más cara en la historia del club inglés. Antony disputó el Mundial de Qatar, apadrinado por Dani Alves y Neymar, con Brasil, pero su fulgurante estrella se ha ido apagando en las últimas temporadas. El atacante conquistó la medalla de oro con la selección brasileña en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 (disputados en el verano de 2021 por la pandemia).

En este curso, por ejemplo, solo ha jugado 14 partidos en todas las competiciones que disputa el United, logrando solo un gol en la Copa de la Liga. Antony es un fichaje que cuenta con la aprobación de Manuel Pellegrini, el entrenador verdiblanco, y debe dar el salto de calidad a una plantilla de la que han salido dos jugadores en el presente mercado invernal. Son los casos del portero Rui Silva, traspasado al Sporting de Portugal, y Assane Diao, vendido al Como entrenado por Cesc Fábregas. Por ambas operaciones, el Betis ha recibido cerca de 16 millones de euros.