Muere Helmuth Duckadam, el portero que privó al Barça de la Copa de Europa en 1986
El legendario guardameta del Steaua Bucarest, apodado ‘El héroe de Sevilla’ después de detener cuatro penaltis en la final continental a los azulgrana, fallece por un paro cardíaco
Helmuth Duckadam, el portero cuya mágica actuación permitió al Steaua Bucarest conquistar la Copa de Europa en Sevilla en 1986 ante el FC Barcelona, falleció en la mañana de este lunes a los 65 años tras ser internado en el Hospital Militar de la capital rumana por una indisposición que le causó un infarto. Fue Marcel Pușcaș, exjugador y director del club más laureado del país de la Europa del Este, quien dio a conocer la noticia en un breve vídeo en la red social Facebook en el que aparece llorando: “He oído ahora que uno de mis mejores amigos, un muy buen colega y futbolista murió, con sólo 65 años. Es el único rumano en el Libro Guinness (de los récords). Murió Helmuth. Helmuth Duckadam, el que consiguió hacer feliz a un país”. Puscas lo tilda de haber sido una persona afable, hombre de familia comprometido y generoso que ayudaba a todas las personas que podía. “Buen viaje, amigo”, concluyó su excompañero entre lágrimas.
Duckadam, que puso en octubre el grito en el cielo ante el Gobierno de coalición formado por socialdemócratas y liberales para pedir una pensión vitalicia para los conocidos como héroes de Sevilla, sufría de problemas de salud desde hace mucho tiempo. Precisamente, el antiguo arquero fue operado a corazón abierto debido a problemas cardíacos hace tres meses. “Yo, desde hace 40 años, tomo entre 18 y 22 pastillas al día. Me han operado cuatro de las arterias, y la última fue a corazón abierto. Fue resuelto por la Casa de Seguros (la seguridad social rumana)”, declaró al diario deportivo sportpesurse.ro. También conocido como la “bestia negra” del Barça aseguró que se gastaba entre 5.000 y 8.000 euros al año solo en medicamentos. “No es fácil para mí, pero no quiero quejarme. Ahora estoy en periodo de recuperación, ni siquiera puedo conducir el coche”, prosiguió.
El exfutbolista ingresaba 10.000 lei (2.000 euros) al mes, que venían del Ministerio del Interior, una prestación vitalicia por ganar la Copa de Europa y una indemnización como revolucionario por su papel en la caída de la dictadura comunista en 1989. En concreto, por levantar el trofeo en la copa se desembolsaba 6.240 lei (1.250 euros). “Lamentablemente, después de casi 39 años, no se encontró (o no se quiso) una solución para integrar a los 20 futbolistas, de los cuales quedan 15, aparte de los 594 deportistas con pensiones vitalicias, que lograron el mayor logro de la historia del fútbol rumano ganando la Copa de Europa”, publicó el exguardameta en Facebook, que llegó a trabajar en la aduana.
Nacido el 1 de abril de 1959 en Semlac, provincia de Arad, consiguió dos veces el título de campeón de Rumania, en 1985 y 1986, además de la famosa Copa de Europa. El nombre de Duckadam quedará grabado en la historia del deporte rey por haber parado cuatro penales al conjunto azulgrana la noche del 7 de mayo de 1986. Tras acabar empatados a cero en los 120 minutos de juego. Marius Lacatuș y Gavril Balint marcaron para el equipo que pertenecía al Ministerio de Defensa, mientras que el portero firmó las épicas paradas que dejaron atónitos a todos los aficionados culés que ansiaban levantar el máximo trofeo continental por primera vez en su historia. Alexanco, Pedraza, Pichi Alonso y Marcos fallaron desde los once metros que lo encumbraron a la memoria de todo amante del fútbol.
Al poco después de su hazaña contra el Barcelona, a Duckadam le diagnosticaron un raro trastorno sanguíneo que lo mantuvo fuera del campo de fútbol durante un largo tiempo. Estaba en una fogata, en la orilla del río Mures, cuando resbaló, se apoyó con la mano y entonces un coágulo de sangre se movió, bloqueando la circulación en su brazo derecho. Fue al médico del pueblo, pero llegó urgentemente a Bucarest, donde lo operaron y le salvaron el brazo, rememora la agencia de prensa Agerpres. Regresó tres años después al Vagonul Arad, de segunda división y en 1991 se retiró definitivamente. Su aneurisma axilar lo llevó a que lo intervinieran quirúrgicamente en el brazo en 1998, 2009 y 2012. En 2004, el exfutbolista del Steaua fue operado por primera vez en la rodilla izquierda, debido a una acumulación de líquido. “Si tienes problemas de salud, como yo, es realmente difícil, pero no hay nada que podamos hacer. Tuve ocho operaciones difíciles y complicadas. ¡Ocho! No es tan agradable cuando sabes que todas las mañanas tomo un puñado de pastillas”, afirmó.
Después de terminar su carrera profesional, Duckadam se unió a la Policía de Frontera en el condado de Arad, junto a Hungría, pero se retiró por motivos médicos. Le tocó la “Lotería de Visas” organizada por la embajada estadounidense en Bucarest, por lo que emigró a Estados Unidos en 2003, junto con su exesposa, Ildiko, y uno de sus dos hijos. Al poco tiempo, al no poder establecerse en Estados Unidos, decidió regresar a Arad. El 25 de marzo de 2008, fue condecorado por la Presidencia rumana con la Orden del “Mérito Deportivo” por su papel en el Steaua que ganó la Copa de Europa en 1986 y el 11 de agosto de 2010 aceptó ser presidente honorario del club de fútbol FCSB, cargo al que renunció en junio de 2020.
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