Lamine Yamal, en la mesa de los grandes: “¿Es que sus entrenadores no ponían siempre a Cruyff, Maradona, Messi o Ronaldo?”, se pregunta De la Fuente

En la Ciudad Deportiva del Barcelona respiraron. “No saltaron las alarmas”, celebraron desde el cuerpo técnico azulgrana, este lunes, después de que Lamine Yamal pasara las pruebas médicas. “El jugador tiene una sobrecarga en el isquiotibial del muslo izquierdo. El tiempo de regreso a los entrenamientos vendrá marcado por su evolución”, reveló la entidad azulgrana. Mismo análisis que habían realizado los galenos de la federación el pasado domingo, después de que el delantero se tuviera no pudiera completar el partido ante Dinamarca en Murcia. “Por suerte está bien, pero le dolía bastante”, subrayan las mismas fuentes del Barcelona.

Justamente ese dolor de Lamine fue lo que le abrió la puerta de salida de la Roja. “Voy a contar lo que ha pasado. Lamine tenía una molestia y yo le pregunté cómo estaba y si podía estar el martes. Cuando el jugador tiene dudas, nosotros no tenemos dudas. Claro que cuidamos a los jugadores, no somos kamikazes”, explicó De la Fuente. En la previa del partido ante Serbia, 11 de las 16 preguntas al preparador tenían un mismo protagonista: Lamine Yamal. De la Fuente no escondió por qué lo cuida ni tampoco porque siempre lo prefiere en el campo. Los mejores tienen que jugar. Eso es lo que se va a pedir. Si no se le pone me pondríais a parir. ¿Es que sus entrenadores no ponían siempre a Cruyff, Maradona, Messi o Ronaldo?”, expuso el preparador de la Roja.

Según De la Fuente, el Barcelona no lo presionó para que liberara a Lamine. Una versión que no coincide con la de la entidad azulgrana. “Presión cero. No he hablado con nadie del Barça. Simplemente, ha habido honestidad. Agradezco el gesto de un futbolista que no está fino y me ha dicho que no está listo para un partido muy importante. Agradezco que sea tan honesto y tan maduro para su juventud”, explicó De la Fuente.

Aunque, según el técnico, Lamine se sienta cuidado en la federación –”Somos una familia”, dijo-, prefirió que el jugador regrese a su casa en lugar de quedarse junto al resto de sus compañeros. “Lamine tiene 17 años y necesita vivir la situación con su entorno. Se siente muy cómodo con nosotros, pero en su casa seguro que se siente mejor. Estará más tranquilo, más cómodo. Lamine siempre ha demostrado un compromiso máximo con nosotros”.

El cuerpo de Lamine le da un aviso. Después de haber vivido una primera temporada en la élite prácticamente sin respiro, en la que disputo 3.850 minutos (2.957 con el Barcelona y 893 con la selección), esta campaña el delantero no quería descansar: llevaba 1.023, entre la Roja y el Barça. Ahora lo tendrá que hacer. Un problema para De la Fuente. “Es insustituible. Lamine es fantástico, pero quien le sustituya también es muy bueno”, cerró el preparador de España.